Tras las inundaciones del pasado octubre, las aguas del Gave han invadido Lourdes ahora con más furia
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Todo se ha inundado. ¡Todo se rehará! Pocos meses después de las graves inundaciones del mes de octubre de 2012, una obra colosal les espera a los responsables del santuario de Lourdes, invadido por las aguas del río Gave, como muestran las impactantes imágenes de este vídeo de TV Lourdes de la web oficial del Santuario.
Tras las violentas tormentas que han azotado 10 departamentos franceses -entre ellos los Altos Pirineos- y las comarcas españolas del Valle de Arán y el Pallars Sobirà, en Lourdes pocos lugares quedan todavía accesibles. El agua, las piedras, los montones de madera y barro prohíben el paso.
La Gruta de Massabielle tiene 1,40 metros de agua. La basílica de San Pío X nunca había visto una inundación así desde su inauguración en 1958: el interior del edificio –un semisótano- se ha transformado en un lago.
Los dispositivos de seguridad del Santuario tienen organizada una unidad especial para anticiparse a la crecida del agua, pero los daños fueron inevitables y se prevén considerables, cuatro veces mayores que los de la inundación del octubre pasado, según el rector del santuario, el Padre Horacio Brito.
Todos los peregrinos fueron evacuados de la parte inferior del lugar, totalmente inaccesible, mientras que en la parte superior (incluyendo la Basílica de la Inmaculada Concepción, la Cripta, la Capilla Mater Dolorosa y Crux Gloriosa), los capellanes de Lourdes organizaron y presidieron las misas en la basílica de la Inmaculada Concepción, en la cripta y en sus capillas.
“Ya tenemos una cierta experiencia de los acontecimientos del mes de octubre de 2012. La diferencia es que ahora hay más peregrinos. Nuestra preocupación principal es mantener la acogida en el lugar en las mejores condiciones”, destacó el rector.
“Tenemos la intención de limpiar una vez empiece a decrecer. Es probable que el Santuario necesite la solidaridad de todos vosotros”, añadió.
Por su parte, el portavoz de la conferencia episcopal francesa, monseñor Bernard Potdvin, expresó la solidaridad de la Iglesia con las personas afectadas por las inundaciones y con todos aquellos para los que Lourdes representa una verdadera fuente de vida fraterna y espiritual. Ahora, hay que hacer todo lo posible, dijo, para que Lourdes “reencuentre lo antes posible las condiciones para su misión mariana universal”.
También en los Pirineos pero al otro lado de la frontera, el santuario de Mijaran, en el Valle de Arán, quedó totalmente inundado y el agua ha ocasionado graves destrozos.
La Virgen, “en su Santuario de Mijaran inundado, también ha participado de los destrozos, y se ha unido a sus hijos del Valle en el sufrimiento y la angustia. Ahora nos ayudará a ir adelante con esperanza y solidaridad los unos con los otros”, señalaba este miércoles el obispo de Urgel, monseñor Joan-Enric Vives en un mensaje de ánimo tras las inundaciones.
