Los valores paternos: la firmeza o la competencia chocan con la política de género
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"La sociedad ha desprovisto de valor la función del padre. No les tiene en cuenta, su autoridad ha sido ridiculizada. Las mujeres prescinden de ellos de forma manifiesta, lo que provoca que los hijos les pierdan absolutamente el respeto", explica María Calvo, autora del libro: “Padres destronados: La importancia de la paternidad”, que acaba de publicar la editorial Toromítico.
Para esta autora: “existe actualmente la idea de que en la crianza y educación de los hijos el padre es un estorbo” y quiere defender la figura del varón como parte esencial para la educación de los niños.
Maria Calvo defiende en este libro-ensayo la idea de que el empeño durante años por parte de determinados sectores en conseguir la emancipación de la mujer ha provocado un efecto pernicioso sobre la figura del padre. En su libro muestra que los progenitores varones sufren un “inevitable destierro”, ya que los valores que defienden: “la firmeza, la competencia o la autoridad chocan frontalmente con los paradigmas de la política de género”.
Para la sociedad el padre es un estorbo
"Existe actualmente la idea, muy extendida, de que en la crianza y educación de los hijos el padre es prescindible. Es incluso un estorbo", asegura María Calvo, quien defiende el código masculino como un elemento crucial para el crecimiento de los hijos, a pesar de que hoy día este modelo se presenta como un método peligroso o no apto, ya que el sistema educativo actual exalta exclusivamente la sensibilidad típica del código materno.
“Los padres desconfían de su instinto masculino y renuncian al ejercicio efectivo de la paternidad", explica la autora, lo que puede producir la falta de respeto hacia los padres y el alejarse de su papel como padre en un futuro próximo.
Para la autora, actualmente intentan sobrevivir toda una generación de padres que no saben muy bien cómo desenvolverse en un mundo que “les obliga a ocultar su masculinidad y no les permite disfrutar de su paternidad en plenitud”.
Funciones del padre
En el ensayo se explican las funciones esenciales que un padre puede realizar y que evitan su “abdicación paterna”. Estas son, “la de liberar al niño de la posesión obsesiva de la madre, capaz de devorar a sus hijos por amor, un hecho que puede hacer que éstos lleguen a crecer sin identidad propia”; “la de inculcar el autocontrol y la empatía”; “la de enfrentarlos con la realidad aparatándolos del excesivo proteccionismo de la madre”; “y la de ser el intermediario entre el hogar y el mundo operando como propulsor de la emancipación de los hijos”.
