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Seis monjas ursulinas aspiran a participar en el festival musical de Eurovisión, con una melodía pop pegadiza basada en sus experiencias en la guardería con niños abandonados.
Su canción, Love and let go del compositor Philip Vella, ya se ha clasificado en la primera ronda de la final nacional, que tendrá lugar los próximos 21 y 22 de noviembre.
El arzobispo de Malta, monseñor Paul Cremona, está contento con la iniciativa de las religiosas y les ha animado a evangelizar el mundo siguiendo la invitación del Papa Francisco, según informó el periódico Times of Malta.
Las hermanas Michaela, Mónica, Rita, Claudia, Denise y Magdalong reconocen que no son profesionales pero ensayan con ilusión después de misa.
