Dice el dicho que en el día de san Patricio todos somos un poco irlandeses. Lo curioso es que el propio santo ni era irlandés ni se llamaba Patricio. Y los desfiles y procesiones para celebrar el día del santo son un asunto mucho más reciente de lo que se cree.
Por todo eso, la revista Time ha preparado un listado en el que figura todo lo que no sabías –y deberías saber- sobre la celebración del día del santo irlandés más querido del mundo. Aquí, hemos querido reproducir algunos de esos datos.
El trébol
A san Patricio se le atribuye la cristianización de Irlanda, a mediados del siglo V. La historia dice que el santo explicaba el misterio de la Santísima Trinidad sujetando un trébol. A juzgar por las evidencias, la metáfora fue particularmente iluminadora: a su muerte, Irlanda contaba con un buen número de iglesias, monasterios y escuelas cristianas.
El 17 de marzo
San Patricio murió un 17 de marzo hace más de 1500 años. O al menos eso es lo que afirma el teólogo franciscano irlandés del siglo XVI Luke Wadding. Este ferviente nacionalista irlandés, tenaz abogado de la causa católica en Irlanda, celebró durante toda su vida sacerdotal la fiesta de san Patricio como si se tratase de una solemnidad. A él se debe el hecho de la inserción de la fiesta de san Patricio en el calendario litúrgico universal.
El azul de San Patricio
No. El color de San Patricio no es el verde, sino el azul. O al menos así lo era. El llamado “azul de San Patricio” aún puede verse en algunas antiguas banderas irlandesas. También en cintas y banderas de la Armada Ciudadana Irlandesa, la misma que procuró el fin de la dominación británica en 1916, con el alzamiento de Pascua. El verde, aparentemente, es consecuencia del uso del trébol como símbolo nacionalista irlandés.
Ni irlandés ni Patricio
Maewyn Succat (que ese era su nombre) nació en Bretaña a inicios del siglo IV. Cuando tenía 16 años, unos saqueadores irlandeses atacaron la casa de sus padres y lo secuestraron. Le mantuvieron en cautiverio por seis años más. Al huir, volvió a Bretaña y fue luego enviado de vuelta a Irlanda, esta vez como misionero. Al ser ordenado como sacerdote, asumió el nombre “Patricio”, como una figura paterna para su feligresía.
El desfile no es irlandés, sino estadounidense
El primer desfile del día de San Patricio se celebró en 1762, cuando un grupo de soldados irlandeses marcharon por las calles de Nueva York un 17 de marzo para celebrar a su santo patrono. Ya para 1848, el desfile se había convertido en un evento oficial de la ciudad, que hoy día atrae a más de tres millones de personas.