Un regalo evocativo de las migraciones forzosas que Francisco ha recordado como un mal de nuestro tiempo
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El Papa Francisco ha realizado este domingo 20 de septiembre en la tarde una visita de cortesía al presidente, Raúl Castro y al representante del Consejo de los Ministros de Cuba al Palacio de la Revolución en La Habana, segunda jornada del peregrinaje papal.
Durante el tradicional intercambio de regalos, el presidente Castro regaló al Pontífice un Cristo migrante, envuelto en una red de pescadores y clavado en un cruz hecha de remos. Un símbolo actual de las migraciones forzadas de hombres y mujeres en todo el mundo, especialmente en Siria e Irak. También un Cristo que podría representar a los balseros cubanos.
Castro saludó antes a los cardenales y dignatarios que acompañan al Pontífice y luego presentó al Papa a sus colaboradores. Tras los saludos iniciales comenzó el encuentro privado que duró 50 minutos.
Por su parte, el Papa agradeció al presidente Castro su acogida y particularmente “los indultos” para alrededor de 3500 detenidos en las cárceles cubanas en ocasión de la visita pastoral.
El Obispo de Roma regaló al presidente un mosaico de la Patrona de Cuba, la Virgen de la Caridad del Cobre, cuyo Santuario visitará mañana en la ciudad de Santiago. La obra fue realizada por los obreros del Estudio del Mosaico de la Fábrica de San Pedro.
El Papa, en el patio del Palacio, se despidió se subió al papamóvil con la ayuda del cardenal de La Habana Jaime Ortega y Alamino, para dirigirse a la catedral en la que se llevará a cabo el encuentro con los sacerdotes y los religiosos y religiosas cubanas.
En este contexto, el pasado viernes 18 de septiembre, el presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, conversó con su homólogo de Cuba, Raúl Castro, sobre el estado del proceso de normalización bilateral y las posibles medidas para aumentar la cooperación, en vísperas de la visita de Francisco a ambos países.
La Casa Blanca informó que en esa conversación sobresalió el ‘unánime reconocimiento de ambos gobiernos del apoyo del Papa al acercamiento bilateral.
La conversación se centró en evaluar “el proceso de normalización entre los dos países antes de las visitas a Cuba y Estados Unidos del papa Francisco” se lee en el comunicado.