Tras el Ángelus pide por las almas de los difuntos y el consuelo de sus familias
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“Ayer, recibimos con gran dolor la noticia de la terrible masacre que tuvo lugar en Ankara, Turquía. El dolor de muchas muertes. El dolor de los heridos. Dolor debido a que los atacantes golpearon a personas indefensas que se manifestaban por la paz. Mientras rezo por ese querido país, pido al Señor reciba las almas de los difuntos y consuele a los que sufren y sus familias”.
Papa Francisco mostraba así su dolor ante el atentado vivido en el día de ayer en Turquía. Dos explosiones poco antes de celebrarse una “Marcha por la Paz” provocaron al menos 95 muertos y 246 heridos. Un atentado que quiebra la paz social y que se ha producido ante la marcha que había sido convocada por los sindicatos progresistas KESK, DISK y las Cámaras de Ingenieros y Médicos
La Marcha tendía como objetivo el protestar contra la escalada de enfrentamientos entre la guerrilla Kurda del PKK y el Estado Turco. Si bien no se conoce aún la autoría del atentado. Todos los indicios parecen suponer que se trata de un atentado suicidad que podría ser causado por el Estado Islámico. Otra de las posibilidades abiertas es la autoría de paramilitares ultranacionalistas turcos, en respuesta a las acciones del PKK.
