Durante 15 años, el instituto IRMA ha brindado ayuda principalmente a mujeres; sin embargo, la atención psicológica incluye también a hombres
Para ayudar a Aleteia a continuar su misión, haga una donación. De este modo, el futuro de Aleteia será también el suyo.
El Instituto IRMA es un espacio que brinda atención psicológica a hombres y mujeres que han perdido a un bebé antes de nacer o a causa del aborto. Durante 15 años, los especialistas del instituto han brindado ayuda principalmente a mujeres; sin embargo, la atención psicológica incluye también a pacientes hombres. En esta ocasión, la terapeuta María Bertina Morales, quien es la encargada de atender a los varones en IRMA, nos revela qué sucede en su mente después de un aborto:
Desde la fe (DLF): ¿Es cierto que los hombres sufren afectaciones psicológicas cuándo pierden a un hijo debido al aborto?
María Bertina Morales (MBM): Los hombres definitivamente sufren afectaciones en su mente al perder a un hijo debido al aborto; sin embargo, son poco demostradas por parte de ellos, y por ende, poco conocidas. Generalmente nadie de su entorno las percibe porque el hombre no llora ni demuestra emociones. Así, la mayoría de las veces el dolor se queda guardado. Sin embargo, hay implicaciones en su psicología más profunda, su vida cambia mucho. Esto ocurre a pesar de que intentan cubrir el dolor con más trabajo, actividad física o cualquier otra actividad. Es un proceso muy largo si el hombre no se atiende. La afectación puede cambiar toda su vida, ya que este tipo de vivencias cambian su visión de sí mismos y de su papel como hombres.
DLF: ¿Qué es lo que siente un hombre luego de que su pareja abortó?
MBM: Mucha culpa, una necesidad muy grande de proteger a la mujer, de no poder dejarla ni apartarse de ella, de ensimismarse y ser completamente hermético. Además, existe una baja en el rendimiento de su trabajo. Hay varones que pueden quedarse solos, sin amigos o familiares. Se da sobre todo una pérdida completa de la confianza en sí mismo, en la imagen física, en su imagen como protector, como hombre que hace lo que tiene que hacer, se vuelve más cobarde.
DLF: Entonces, ¿qué piensan los hombres respecto a la paternidad?
MBM: En el hombre hay muchos factores que afectan cómo vive su paternidad. Hay algo que determina su sentimiento al momento de que se entera que será padre: la manera en que fue educado. A partir de eso, él comenzará a interrogarse sobre si será el único sostenimiento de la familia, el que apoya, el que aporta, si es una relación causal, de tiempo, o si es superficial. Esto puede marcar el sentimiento de bienestar o malestar al momento de enterarse de ser padre.
DLF: Un hombre que estuvo de acuerdo respecto al aborto que efectúo su pareja, ¿cómo verá afectadas sus emociones futuras?
MBM: Es cierto que las afectaciones emocionales de su mente dependerán mucho del nivel de participación que tuvo al momento de elegir la vía del aborto. Los hombres, luego de sucedido el aborto, suelen volcar toda su atención sobre la mujer. Muchas veces son ellos los que buscan dónde atender a su pareja. Incluso la acompañan a terapia. Esto pasa cuando es más activa su participación en la decisión del aborto. Esto, por su puesto, tiene su origen en un malestar interno, parte culpa y parte confusión.
DLF: ¿Cómo afecta a un hombre la noticia de que será padre?
MBM: Ser padre es algo muy fuerte aunque los hombres no lo manifiesten. En los hombres quizá desde niños la paternidad no es tan notoria, pero en algún momento de su vida se plantean la idea de serlo. Piensan que cuando esto suceda todo debe estar listo, debe tener una buena condición económica, apoyar en todo lo que sea necesario; y si esto no ocurre, entonces viene una ruptura muy fuerte, el hombre se cuestiona mucho. Son factores que pueden incidir en la elección del aborto.
DLF: ¿Existe un momento indicado para que un hombre sea padre?
MBM: Sería en el momento en que logran dar su apoyo completo a la mujer. Es decir, en el momento en que llegan a la estabilidad, y pueden ofrecer un hogar, un apoyo, todo lo necesario. Tienen además que sentir mucho amor por la mujer, pues a través de las transformaciones de su cuerpo es como se logra el primer vínculo con su bebé.
DLF: ¿Cuál es el proceso para curar la mente de un hombre después del aborto?
MBM: Primeramente ellos tienen que entender por qué siente lo que siente, los hombres y las mujeres sienten de diferente manera. Las mujeres repasan constantemente los hechos. Los hombres le dan carpetazo y se van al trabajo, y no lo vuelven a tocar, porque si sufren empiezan a mirar a otro lado. En IRMA vamos trabajando con ellos, en hacer el vínculo con él bebé que murió. Ir sanando las heridas que generó la relación, ir sanando también la herida que dejó su participación en el aborto, vamos trabajando sobre eso, para que él vaya reconstruyéndose, es como cuando alguien empieza un rompecabezas… hay que buscar la pieza para empezar a armarlo.
DLF: ¿Se ha encontrado con casos difíciles? Aun así, ¿es posible ayudarlos?
MBM: Claro que hay hombres que se muestran más herméticos. Esta es una estructura dictada por la cultura, pero también hay características femeninas y masculinas. El hombre es más analítico, se caracteriza por ser el apoyo de la familia, él no se puede romper ante los otros porque su propia cultura no se lo permite; sin embargo, en mi experiencia los hombres que son atendidos logran restablecer la alegría de su espíritu, y lo más importante, se vuelven defensores de la vida al entender lo que ésta significa.
Artículo originalmente publicado por SIAME