El Pontífice también expresó su dolor por la muerte de un centenar de personas en Nigeria durante un trágico accidente
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El papa Francisco manifestó su dolor y cercanía a las familias de los once cristianos asesinados el 24 de diciembre, quienes eran residentes en una aldea en Mindanao (Filipinas) y sufrieron un ataque realizado por milicianos yihadistas del grupo Luchadores por la Libertad Islámica del Bangsamoro (BIFF, por sus siglas en inglés)
El telegrama del Papa firmado por el cardenal Pietro Parolin, Secretario de Estado vaticano, se envió al Nuncio Apostólico en Manila (Filipinas), Mons. Giuseppe Pinto, luego del ataque a una aldea cristiana en un centro agrícola en la provincia de Sultán Kudarat, al sur del país.
El Pontífice y pidió a todos los creyentes “rechazar la violencia en nombre de Dios, que es amor”. Al mismo tiempo, que las autoridades locales elevaron a 11 los muertos en el ataque perpetrado la pasada Nochebuena.
“El Santo Padre se entristeció profundamente al conocer el asesinato sin sentido de personas inocentes en Mindanao, y envía sus condolencias a las familias de los que perdieron la vida”, se lee en el mensaje en inglés.
“Su Santidad reza para que el orden y la seguridad sean restablecidas para toda la gente en la región, de modo que el diálogo, la tolerancia y la paz puedan permitir a cada persona vivir sin temor”, añade el telegrama.
Asimismo, invocó “abundantes dones divinos de consuelo, piedad y fuerza sobre aquellos que sufrieron esta tragedia”.
Este 27 de diciembre, Joan Petinglay, portavoz de la 6 División de Infantería del Ejército, afirmó que participaron en el ataque unos 200 militantes de la organización BIFF. Los rebeldes islámicos provocaron la evacuación de unos 6.000 campesinos y ejecutaron a 11 personas, mientras que los soldados mataron a 5 miembros del BIFF en las provincias de Maguindanao, Sultan Kudarat y Cotabato Norte.
Condolencias a las víctimas de la explosión en Nigeria
Por otro lado, el papa Francisco expresó su dolor a través de una misiva dirigida a las familias de los fallecidos y las víctimas por la tragedia ocurrida esta semana en la ciudad nigeriana de Nnewi, donde decenas de personas murieron a causa de la explosión de un camión en un almacén de gas.
En un comunicado, se lee que “el Santo Padre se entristeció profundamente al enterarse de la trágica explosión en una planta de gas en Nnewi, en la que tantas personas murieron o resultaron gravemente heridas”.
Alrededor de 100 personas han muerto en la tragedia debido a la explosión de un camión cisterna cuando se encontraba parado en un concurrido distribuidor de gas, mientras decenas de personas estaban haciendo la fila para llenar sus tanques de gas para cocinar.
El Santo Padre “ha enviado sus sentidas condolencias a los familiares de los fallecidos y heridos, a las autoridades y a toda la Nación. Su Santidad, encomendando las almas de los difuntos a la misericordia de Dios, invoca los abundantes dones divinos del consuelo y fortaleza a los que lloran y sobre todos los que han sido afectados por esta tragedia”, se lee en la nota de la Oficina de Prensa de la Santa Sede.
Esta tragedia también golpea a la comunidad mayoritariamente cristiana en Nnewi, sudeste del país africano.
