Verdaderas esculturas de chocolate que producen ansiedad, deseo y gula….
Tras una semana santa de torrijas, en Cataluña, entre otros lugares de España, la tradición marca regalar las conocidas “monas de pascua”. El nombre proviene de la munna, término árabe que significa “provisión de la boca”, regalo que los musulmanes hacían a sus señores.
En esta semana santa los escaparates de Barcelona están llenos de estas monas que son verdaderas esculturas de chocolate que producen ansiedad, deseo y gula.
En Cataluña y Baleares la mona ha ido evolucionando a lo largo del tiempo, y hoy en día conviven diferentes tipos de monas tradicionales.
La más antigua es como la tradicional valenciana, que en algunos casos puede tener forma de corona o en otros de punto.
Otra mona tradicional mantiene los huevos cocidos, que suelen pintarse de colores, pero la base se hace de bizcocho y se rellena de crema y de chocolate o mermelada, se cubre de crema catalana quemada en la superficie horizontal y de almendras en los lados.
Con el tiempo se han ido adornando cada vez más de plumas de colores, de pollitos y de grageas de chocolate cubiertas de glasa de colores. En Menorca suelen estar, además, cubiertas de merengue.
Poco a poco, los huevos de gallina se han ido sustituyendo -aunque aún son muy populares también- por huevos de chocolate. Más adelante, los adornos de chocolate toman cada vez más importancia y, actualmente, algunas monas hechas por maestros pasteleros son esculturas, que pueden alcanzar grandes dimensiones, hechas únicamente con chocolate negro.
Tradicionalmente el padrino regala la mona a su ahijado el Domingo de Pascua después de misa. El Lunes de Pascua es tradición que se reúnan dos o tres familias o un grupo de amigos y que vayan a comer la mona juntos a algún lugar, en un festín en el que no faltan las chuletas de cordero, conejo a la brasa, la paella y, sobre todo, el vino.
En muchas poblaciones las pastelerías compiten para exhibir en su escaparate la escultura de chocolate más espectacular, que puede ser una maqueta de un edificio una figura de un personaje popular o un conjunto de tartas con figuras de chocolate o guirlache. Este alimento propio del lunes de Pascua, la mona, y la costumbre de hacer una salida al campo para comerlo en familia ha acabado dando nombre al día, que para muchos es “el día de la mona”.
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