La sofrología, método alternativo de relajación creado en los años 60, puede ayudarte a vencer el estrés. Descubre cómo con las sofrólogas Alexia Cordier y Rachel Rey.
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De acuerdo con un sondeo realizado en enero de 2016 por la Chambre Syndicale de la Sophrologie [Cámara Sindical de Sofrología], el 61% de los franceses dicen sentirse afectados por el estrés.
Para vencer esta inquietud y recuperar la calma mental, la sofrología, un conjunto de técnicas de relajación creadas en la década de 1960 por el psiquiatra colombiano Alfonso Caycedo, puede ser una ayuda muy valiosa. Alexia Cordier, sofróloga y coach, y Rachel Rey, enfermera sofróloga, presentan este método y proponen algunos ejercicios para realizar en casa.
¿Qué es la sofrología?
La sofrología es un método alternativo que permite, a través de una profunda relajación del cuerpo, conseguir tranquilidad mental, explica Rachel Rey.
Relajar la mente directamente es complicado, confirma Alexia Corder. Tratar de actuar sobre el estrés con las herramientas occidentales, que son la voluntad o la determinación, no funciona muy bien y puede incluso generar más ansiedad. El principio de la sofrología es relajar el cerebro a través del cuerpo, apoyándose en diferentes técnicas, como la respiración o los movimientos dinámicos.
¿Cómo puede combatir el estrés la sofrología?
La sofrología ayuda a vivir en el momento presente y el simple hecho de vivir el momento hace disminuir el estrés, indica Rachel Rey. Gracias a ejercicios de respiración, estimulamos la liberación de una hormona denominada acetilcolina (hormona antagonista del estrés), que acciona a su vez la actividad del sistema nervioso parasimpático. Al principio constatamos una acción de relajación del cuerpo que se libera de sus tensiones, luego percibimos una acción de relajación de las barreras mentales.
Muchas técnicas dentro de la sofrología permiten recuperar la serenidad, añade Alexia Cordier. Los anclajes, por ejemplo, cuando se asocia un gesto al estado de relajación de modo que la persona pueda, en caso de estrés, repetir el gesto solo y volver a ese estado de relajación.
Las visualizaciones, también, que consisten en proyectarse mentalmente uno mismo en una situación antes de que llegue; es decir, cuando preparamos unos exámenes o una competición deportiva, por ejemplo, imaginamos el éxito, imaginamos que rendimos bien, al tiempo que relajamos el cuerpo. El cerebro piensa entonces que eso ha pasado de verdad y reducirá el nivel de estrés cuando llegue el evento.
Tres ejercicios para iniciarse en la sofrología en casa
La respiración abdominal
Alexia Cordier y Rachel Rey aconsejan comenzar por este ejercicio básico, muy eficaz para las madres que van con prisa constantemente. En posición sentada o tumbada, ponemos las manos sobre el vientre e inspiramos profundamente por la nariz, sintiendo el movimiento de las manos que se levantan con la respiración. Luego, exhalamos lentamente por la boca manteniendo la concentración en las manos, que descienden con el movimiento del vientre. Repetir al menos 5 veces, lo ideal es hacerlo 10; pero cada uno a su ritmo.
La sofronización de base
Este ejercicio consiste en relajar progresivamente todas las partes del cuerpo, explica Alexia Cordier. En posición sentada o acostada, comenzamos por relajar todos los músculos de la cara, de la nuca, de la espalda, y así hasta los pies. Una vez hecho, podemos “estirar las espiraciones”, es decir, concentrarnos en la respiración con espiraciones cada vez más largas.
La visualización
Después de haber hecho alguno de los dos ejercicios anteriores, visualizamos un paisaje agradable, uno cuya imagen nos suscite un sentimiento positivo. Puede ser un paisaje vacacional, un entorno imaginario, pero debe generar un sentimiento de bienestar. Lo visualizamos durante unos treinta segundos, siempre en contacto con esta imagen. Parece simple, pero produce una gran relajación, asegura Alexia Cordier.
Nota del editor: Hay que distinguir entre una sofrología médica que consiste simplemente en técnicas de respiración para combatir el estrés, y que obviamente es la que proponemos aquí. Otra cosa muy distinta es la sofrología que mezcla metafísica gnóstica con pensamiento positivo, que no tiene nada que ver con el contenido ni el propósito del artículo.