BLW se basa en la nutrición autorregulada por el bebé. Nos llevará un poco más de tiempo y paciencia, pero es una opción con múltiple ventajas
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Muchas veces -principalmente cuando somos padres primerizos y estamos aprendiendo con la práctica del día a día- tenemos dudas o no sabemos qué hacer frente a diversas situaciones con el bebé. Por ejemplo, debemos decidir cómo empezar con su alimentación, buscamos en internet o le preguntamos a una amiga si conoce -o le resultó bien- tal o cual método para darle de comer.
Como padres buscamos siempre lo mejor para nuestros hijos y cuando de alimentación se trata mucho más.
A pesar de que existen muchas modalidades para comenzar con la alimentación complementaria (AC), una de las que ha cobrado mucho interés es el método conocido como Baby Led Weaning (BLW), cuya sigla en inglés significa alimentación autorregulada por el bebé.
¿En qué consiste el BLW?
Básicamente en ofrecerle al niño a partir de los 6 meses de edad -que es el inicio de la alimentación complementaria (o sea la lactancia materna deja de ser exclusiva y se comienzan a incorporar paulatinamente los alimentos)- una gran variedad de alimentos enteros y en forma y preparación adecuadas en vez de papillas. Es el propio bebé que los lleva a su boca en función de su apetito y preferencias.
Es importante saber que entre los 6 y 8 meses de edad un 30 % de la alimentación deberá ser aportada por la AC y el resto será a través de la leche (pecho o leche de fórmula). Pero luego entre los 9 y 11 meses, se cubrirá un 50% con la AC y la otra mitad con la leche materna.
¿Cuáles y cómo deben ser los alimentos?
Primero se deben hervir todos los alimentos y luego se cortan en trozos alargados para que el niño lo pueda agarrar con sus manos, ya que todavía a los 6 meses no hacen la unión del pulgar con el índice (pinza) sino que lo hacen abriendo la mano entera para posteriormente cerrarla (prensión palmar).
Los alimentos para comenzar los primeros días son vegetales y frutas siempre cocidas, carnes, cereales. Luego de los 7 u 8 meses, leguminosas, quesos, yogur. Luego de los 8 meses, huevo y pescados, pero todo bien cocido, en crudo nada al principio porque hay mayor riesgo de atragantamiento.
Hay algunos alimentos que se deben evitar al comienzo como verduras y manzana crudas, papas de bolsa, galletas de arroz o maíz, frutos secos o desecados, cerezas, uvas, maíz o choclo, arvejas, caramelos.
Ventajas de BLW
- Promueve la incorporación a la mesa familiar, a la vez que fomenta la ingestión de alimentos más saludables.
- Promueve el desarrollo de habilidades motoras y cognitivas.
- Propicia el reconocimiento de sensación de saciedad, con lo que supuestamente reduce la posibilidad de desarrollar sobrepeso. Se necesitan aún estudios que demuestren que a largo plazo puede ser beneficioso.
Desventajas
- Así como este método brinda beneficios pueden presentarse algunos inconvenientes en los que hay algunos profesionales que están de acuerdo y otros que no.
- Uno de los riesgos es no cubrir los primeros meses con las necesidades energéticas recomendadas y por lo tanto se presenten desajustes nutricionales como anemia ferropénica (por falta de hierro) o insuficiente ganancia de peso.
- Con respecto a esto, también puede suceder con otras formas de alimentación. Por lo tanto, una manera de evitarlo es comenzando con alimentos ricos en hierro y no dejarlos para lo último. Se puede comenzar sí con verduras y frutas, pero también con carnes y cereales fortificados con hierro.
- Otro de los posibles riesgos es el de atragantamiento. Una manera de prevenirlo es no dejarlos solos en el momento que están con los alimentos.
Algunos consejos para reconocer si él bebé ya está listo para este método
Hay que tener presente que esta modalidad requiere dedicación y paciencia porque al principio juegan con los alimentos, entonces se ensucian y se desperdician algunos, pero lo que se debe destacar es el encuentro con los alimentos y la experiencia con distintas texturas, sabores y colores.
A pesar de que hay muchos defensores y detractores de este método, lo más importante es educar al niño en la alimentación de un modo responsable y con sentido común. Estar atentos al tipo de alimentos que le ofrecemos y los nutrientes que contienen como energía, proteínas y hierro.