¿Qué familia no ha vivido los celos del hermanito con los papás?
Para ayudar a Aleteia a continuar su misión, haga una donación. De este modo, el futuro de Aleteia será también el suyo.
En las conversaciones sociales, en los consultorios médicos o psicológicos, los padres buscan saber cómo lidiar con la situación de los celos entre los hermanos. La respuesta es que no existe una receta; sin embargo, algunos consejos pueden ayudar.
El peligro de la comparación
El comportamiento de los padres puede estimular los celos de los hijos a medida que los comparan, mostrando los puntos fuertes en relación a los débiles porque éstos son diferentes y poseen habilidades diferentes.
En lugar de comparar, muestra los puntos fuertes de cada uno, para que nazca una admiración entre ellos, reforzando la importancia de un hermano en la vida del otro, principalmente cuando, además del parentesco, desarrollan una relación de amistad.
Cuando nace un hermano, el más grande puede empezar a tener comportamientos inadecuados. Ten cuidado para no excederte en los castigos, pues lo que él quiere es llamar la atención; y si él no logra eso por el lado positivo, el lado negativo pasa a ser una alternativa viable.Cuida al que es reservado, porque también necesita atención, a pesar de no demostrarlo. Los sentimientos no trabajados se pueden extrapolar en algún momento y de forma inadecuada.
Mucha calma en ese momento
Muchos papás se desesperan con la pelea entre hermanos. Mucha calma en ese momento. Es un tiempo que ellos tienen para marcar sus espacios; pero estáte atenta a las causas de los celos. Si fuera necesario, intervén, recordando que la mayoría de los roces los resuelven entre ellos.
En el momento en que las peleas se vuelven muy frecuentes y acaloradas, canaliza las energías para el deporte, las actividades artísticas o juegos que refuercen el trabajo en equipo.La mayoría de los padres ya ha escuchado a su hijo preguntarle si es adoptado, porque piensa que el hermano es más amado que él.
No te culpes si tienes más afinidad con uno que con otro, pues eso no significa que amas más o menos. Los papás aman a los hijos de forma diferente, respetando la individualidad de cada uno; sin embargo, es necesario el diálogo con ellos, para que pueda hablarse del asunto y plantear los sentimientos.
Si ellos apuntan su preferencia por alguno de ellos, observa su comportamiento para ver si procede, pues eso no puede suceder. Los celos entre hermanos, por lo tanto, necesitan ser trabajados desde temprano, para que no se vuelva una enemistad.
Artículo de Ângela Abdo ha sido publicado originalmente en la revista de Canção Nova y ha sido traducido y adaptado para los lectores de la edición española de Aleteia.