Quizás el grupo yihadista esté derrotado en gran medida en Irak y Siria, pero la amenaza del terrorismo aún persiste
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Primero, Mosul fue recuperada de manos del grupo Estado Islámico, y ahora Raqa.
La pérdida de dos ciudades principales es todo un golpe contra el sueño de la organización yihadista de establecer un califato mundial.
Sin embargo, los expertos afirman que existen otras ciudades donde el grupo terrorista puede operar ahora: París, Nueva York, Londres, por ejemplo.
Con el retroceso de Daesh bajo la presión de las unidades militares en Irak y Siria con ayuda del apoyo o el liderazgo la coalición con EE.UU., aumenta la preocupación por que la organización terrorista islamista guarde todavía algún tipo de golpe, fuera de Irak y Siria. Fuentes oficiales y expertas temen que vayan a incrementar los tipos de ataques terroristas que han tenido lugar en ciudades occidentales y del sureste asiático en los últimos años.
El Estado Islámico “tiene un plan”, contó Aaron Y. Zelin del Instituto de Washington para la Política de Oriente Próximo (WINEP) al New York Times, “y consiste en esperar a que pase la tormenta localmente para poder ganar tiempo para reconstruir sus redes, al mismo tiempo que ofrecen inspiración a seguidores de fuera para seguir luchando contra sus enemigos más remotos”.
“Está claro que nos estamos enfrentando a una intensa amenaza terrorista en Reino Unido por parte de extremistas islamistas”, añadió Andrew Parker, director del servicio de inteligencia británico MI5. “Esa amenaza es multidimensional, evoluciona rápidamente y opera a una escala y un ritmo que no habíamos visto antes”.
“Se trata de un grupo muy fuerte con muchos simpatizantes, con ideas arraigadas y sus propias redes”, afirmó Daniel L. Byman, socio sénior del Centro de Políticas para Oriente Medio de Brookings Institution. “Dispone de muchos recursos incluso cuando pierde su territorio físico”.
Basándonos en un discurso del portavoz de Daesh, Abu Mohamed al Adnani, antes de su muerte el año pasado en un ataque estadounidense con drones, el grupo tiene la voluntad de continuar luchando, incluso si pierde territorio. “La verdadera derrota es perder la voluntad y el deseo de luchar”, afirmó. “Solo seremos derrotados y vosotros victoriosos si sois capaces de eliminar el Corán de los corazones de los musulmanes”.
