La Cruz de San Andrés, en forma de "x", tiene relación directa con el martirio de este santo apóstol de Cristo y hermano de San Pedro.
Es más, él fue el intermediario del encuentro entre Pedro y Cristo al dar testimonio delante de su hermano: "Hemos encontrado al Mesías". Dado que presentó a muchas otras personas a Jesús, la tradición dio a san Andrés el título de "puente del Salvador".
Discípulo fervoroso de Jesús, San Andrés padeció el mismo suplicio que su Maestro: la crucifixión. Pero igual que su hermano Pedro, pidió que no le crucificaran en una cruz de la misma forma que su Maestro, porque no se consideraba digno de tanta semejanza.
Así que le crucificaron, según el relato tradicional, en la llamada, en latín, "crux decussata", con forma de "x", y que pasó a ser conocida, justamente, como Cruz de San Andrés.
Banderas
Además de formar parte de la vasta iconografía cristiana, también fue incorporada a la heráldica, pasando a ser usada en banderas y blasones de armas. El caso más famoso es el de la bandera de Escocia.
A propósito, una tradición escocesa afirma que las relíquias de San Andrés fueron llevadas a ese país, concretamente a la ciudad que hoy lleva su nombre, Saint Andrews.
Gracias a la presencia de Escocia en el Reino Unido, la Cruz de San Andrés pasó a formar parte de la propia bandera de la Unión, que es el resultado de la superposición de tres cruces:
- la de San Jorge, de la bandera de Inglaterra (roja, en el medio, con fondo blanco);
- la de San Patricio, que representa a la isla de Irlanda (roja en formato de X, con fondo blanco);
- y la de San Andrés, de la bandera de Escocia (blanca, en formato de X, con fondo azul).
En la espiritualidad cristiana, la Cruz de San Andrés suele representarse con estas palabras atribuidas al Apóstol:
"¡Salve Santa Cruz, tan deseada, tan amada! Sácame de entre los hombres y entrégame a mi Maestro y Señor, para que yo, de ti, reciba al que por ti me salvó!"