El Síndrome de Muerte Súbita del lactante (SMSL) es la principal causa de mortalidad infantil y el 90% de los casos ocurren antes de los 9 meses de vida
Para ayudar a Aleteia a continuar su misión, haga una donación. De este modo, el futuro de Aleteia será también el suyo.
La muerte súbita es la que se produce en una persona que, aparentemente, está sana y en buen estado de salud. Normalmente, ni las autopsias aciertan a revelar la causa por la qué ocurrió el suceso.
El SMSL tiene más probabilidades de ocurrir entre los 2 y 4 meses de edad y afecta más a los niños que a las niñas.
La mayoría de las muertes por SMSL ocurren durante el invierno.
Según el Dr. Julián Pérez-Villacastín, Responsable de la Unidad de Arritmias del Hospital Universitario Clínico San Carlos de Madrid, “no se conoce bien la causa de la muerte súbita del lactante, pero lo que sí que se conoce es que está disminuyendo debido a medidas de precaución que pueden tomar los padres o cuidadores del recién nacido”.
Las dos medidas más importantes para evitar la muerte súbita del lactante son:
- Asegurarse de que el bebé se encuentra bocarriba cuando está durmiendo
- Que la madre no fume, ni durante el embarazo ni durante el cuidado del niño.
Deberíamos añadir a estos dos factores de riesgo evitar abrigar en exceso y en consecuencia inmovilizar al recién nacido y mantenerlo en ambientes o habitaciones poco ventiladas.
La mayoría de las muertes por SMSL suceden durante el invierno y esto nos conduce a pensar que las condiciones de frío pueden propiciar comportamientos de riesgo que incrementen la mortalidad de los recién nacidos.
Otros factores de riesgo SMSL
- Dormir en la misma cama de los padres.
- Partos múltiples (ser mellizo, trillizo, etcétera).
- Partos prematuros.
- Tener un hermano o hermana que padeció SMSL.
- Madres que fuman o consumen sustancias psicoactivas.
- Nacer de madre adolescente.
- Intervalos de tiempo cortos entre embarazos.
- Cuidado prenatal tardío o ausencia de éste.
- Vivir en condiciones de pobreza.
Disminución de SMSL en la actualidad
Actualmente, a parte de las medidas básicas de seguridad para evitar la muerte súbita del lactante, se encuentran en el mercado dispositivos de vigilancia para los recién nacidos que monitorizan la frecuencia cardíaca y el valor de oxígeno en sangre del bebé. Estos dispositivos pueden ser de ayuda para avisar a los papás de que algo no va bien.
Afortunadamente, la muerte súbita del lactante es cada vez más infrecuente pero todavía prevalece, especialmente en los entornos más desfavorecidos. No nos debemos olvidar que los bebés nacidos en familias con pocos recursos económicos o en situación de precariedad son los más vulnerables a esta triste situación. Las familias que se encuentran en una situación de pobreza tienen menos recursos para prevenir la muerte súbita del lactante.
Según un estudio realizado por el Instituto Infobae América en el 2018 se constata que la muerte súbita del lactante es más frecuente cuando la edad de las madres es de 19 años o menos.
Recomendaciones para prevenir el Síndrome de Muerte súbita del lactante
- La postura “boca arriba” es la más segura.
- Evitar la posición “boca abajo” hasta los 6 meses.
- No abrigar al bebé en exceso.
- Mantener una temperatura ambiental agradable, de aproximadamente 20 a 22º C.
- Evitar cubrir la cabeza del bebé con ropa.
- Evitar humos cerca del bebé, principalmente tabaco.
- Evitar colchones blandos o de lana, colgantes u otros objetos que podrían dificultar la respiración del recién nacido.
Finalmente, la muerte súbita puede ocurrir en diferentes grupos de edad, pues cada colectivo tiene unas características y unos factores de riesgo distintos. Dicha clasificación nos ayuda a actuar acorde con las necesidades de cada grupo para incrementar el porcentaje de éxito en la prevención.
La prevención y el conocimiento de los factores de riesgo son la clave para prevenir este tipo de sucesos.