Un gerente de empresa decidió ayudar a una de sus empleadas, Tatiana, que acababa de perderlo todo en un incendio en su casa cerca de Toulouse. La iniciativa dio origen a bello impulso solidario.¿Podemos permanecer insensibles a las desgracias ajenas? Para Jean-Thomas Rougeron, gerente de una empresa de servicios a domicilio cerca de Toulouse, esto es imposible. En la noche del 8 al 9 de febrero, Tatiana, una de sus empleadas desde 2014, lo perdió todo en el incendio de su casa. De un día para otro, se encontró en una situación de desamparo extremo con su pareja y sus tres hijos.
Su jefe, que no podía quedarse de brazos cruzados, decidió echar una mano a esta familia ayudándoles a reinstalarse, informa France 3 Occitanie. Así pues, decidió iniciar un llamamiento a las donaciones a través de Facebook: “Apelamos a vuestra generosidad. Esa generosidad que inspira vuestra bondad en el día a día, pero también la generosidad que todos tenemos en nuestros corazones para ayudar a los necesitados en un momento crítico de sus vidas”.
El mensaje del gerente se difundió enormemente y dio origen a una verdadera ola de solidaridad: muebles, juguetes para los niños, ropa, electrodomésticos… “Lanzamos un llamamiento en un cubo de agua y recibimos un océano a cambio”, explicó Jean-Thomas Rougeron en France 3 Occitania. Una hermosa sorpresa para Tatiana que “no pensaba que todavía estuviéramos en una sociedad donde la gente fuera tan solidaria y empática con los demás”, reaccionó emocionada.