La educación digital en el entorno familiar es fundamental para prevenir la adicción a las nuevas tecnologías y sus malas consecuencias.
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No podemos negar los efectos adictivos que la tecnología tiene en la población. Hoy en día un mensaje de texto suple una visita, un “like” sustituye un abrazo, y un “follow” remplaza una palabra de afirmación. Si los adultos nos sentimos atados a nuestros teléfonos, los adolescentes se sienten dependientes, pues pueden ser su principal medio de socialización.
Existen movimientos como el de Tristan Harris (Time well spent, o tiempo bien invertido en español) que se dedican a hacernos ver cómo estamos totalmente dominados por la tecnología, y que existen funciones que nos obligan a mirar o a prestar una atención excesiva a nuestros teléfonos.
Pero ¿qué técnicas utilizan estas empresas para aumentar cada vez la atención de nuestros jóvenes y secuestrar su interés?
La mayoría de las funciones son diseñadas con base en el comportamiento humano. La necesidad de aceptación de los jóvenes, o la presión social hacen que los “likes” se conviertan para ellos en una inquietud difícil de dejar pasar.
Aquí una lista de las funciones claves diseñadas para mantener la atención:
1. La reproducción automática
Utilizada por las plataformas de video (Netflix, Youtube) se encarga de seguir reproduciendo contenido cuando se termina el video que se estaba viendo. Esta función invita a quedarse enganchados consumiendo contenidos que a veces ni siquiera son apropiados.
Como padres debemos estar pendientes de desactivar esta función, o de poder explicar a nuestros hijos que es importante poner límites y saber cuáles son los videos o películas que vamos a mirar, y poder parar cuando terminamos de verlos.
2. Las compras en la aplicación
Muchas veces las descargas de las aplicaciones son gratis, pero luego para poder avanzar en el juego, o para acceder a funciones interesantes se necesita pagar.
Muchos padres han descubierto que sus hijos han gastado grandes cantidades de dinero en compras de monedas, o vidas en un videojuego o aplicación. A veces es mejor optar por la versión completa de los juegos y pagar un poco más que someter a nuestros hijos a la oferta constante de ventas dentro de las aplicaciones.
También es importante explicar a nuestros hijos que el dinero que se gasta en las aplicaciones es igual al dinero que gastamos en la vida real, a veces se pueden sentir confundidos por la facilidad y la inmediatez de la tecnología.
3. Las notificaciones
Estudios han demostrado que las notificaciones crean hábitos y despiertan la curiosidad en cualquier momento del día. Muchas empresas incluso han descubierto cómo llamar la atención o la curiosidad de los consumidores con frases llamativas en las notificaciones.
Es muy fácil desactivar las notificaciones o incluso ponerles un horario. Demos el ejemplo a nuestros hijos enseñándoles que no somos esclavos de las notificaciones, que podemos esperar para leer un mensaje o para abrir un correo electrónico. La inmediatez que exigen las notificaciones son creadores de estrés en nuestras vidas.
La tecnología ha enriquecido mucho la vida moderna, sin embargo, como padres tenemos la responsabilidad de saber cómo funciona y cuáles son las técnicas utilizadas por las empresas para mantener secuestrada nuestra atención y la de nuestros hijos. Sólo conociendo estos trucos podremos tomar medidas que nos permitan usar bien la tecnología y luchar contra esta adicción moderna.