Una propuesta que hace reflexionar sobre la migración y la integración
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“Yo soy Oula, cantante, artista y… refugiada árabe. Todo lo que he tenido que pasar y sufrir, la guerra en Siria, haber perdido familiares y amigos. Todo eso me ha dado fuerza”.
Al igual que Oula -que cuenta su testimonio en un video publicado por UNHCR-ACNUR– son varias las personas provenientes de diversos países como Irán, Palestina, República Democrática del Congo, además de Siria, entre otros, que han encontrado su lugar de acogida en la Orquesta Mundana Refugi de Sao Paulo, Brasil, fundada hace poco más de un año.
“Cada momento que estoy en el escenario, cada melodía que canto lo hago por él”, dice emocionada Oula, que perdió a su padre en Homs al inicio del conflicto sirio.
Efectivamente, esta propuesta musical pretende ser símbolo de integración, paz , solidaridad y esperanza con respecto a los temas de inmigración y de convivencia.
El encargado de liderar esta orquesta es Carlinhos Antunes, quien tiene la gran misión no solo de moldear ritmos musicales, sino también infinidad de estilos y experiencias de vida distintas.
“Todos pueden cantar en sus idiomas y en idiomas que no son suyos. Los congoleños, por ejemplo, cantan en portugués y suajili y las iraníes lo hacen en español y portugués, es decir, lo interesante es que además de comunicarse en otros idiomas puedan ubicarse en otras culturas”, señaló en diálogo con EFE.
En los últimos días esta orquesta tenía la misión de presentar un nuevo tema propio y otro cedido el compositor brasileño Chico Buarque llamado‘As Caravanas’, para algunos –más allá de diferentes interpretaciones al respecto- con aspectos sobre la migración que los identifica.
“Cantar me da mucha fuerza, me hace olvidar muchas cosas que viví en mi país hasta venir aquí y me hace sentir mejor”, Mariama Camara, una bailarina, cantante y percusionista guineana que llegó a Sao Paulo como refugiada hace una década dejando a sus hijas atrás, reproduce EFE.
Para ella, al igual que Oula y tantos más esta orquesta representa una gran oportunidad de seguir soñando y dejar atrás un pasado lleno de dolor y sufrimiento. Y como concluye el video: “Refugiados y artistas están creando un sonido único y usan la música como un instrumento de paz”. Por eso, más allá de los gustos musicales, escuchar sus historias representa un verdadero deleite para los oídos.
Con información en base a EFE y UNHCR-ACNUR