Como padres estamos atentos en todos los preparativos, desde su uniforme hasta lo que le prepararemos para su merienda escolar.
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Cada día crece la más la preocupación de los padres por la alimentación de sus hijos en la escuela.
La alimentación de nuestros pequeños en sus distintas etapas de la vida es de vital importancia para que ellos crezcan fuertes, sanos y con buenos hábitos alimentarios.
Estos valores serán los que más adelante transmitirán también a sus hijos. Por lo tanto, es nuestra responsabilidad como padres fomentarlos adecuadamente en el hogar y también en el ámbito escolar.
Sabemos que allí pasan muchas horas y es por ello que en estas meriendas debemos introducir alimentos saludables considerando necesidades, variedad, gustos y preferencias.
La alimentación debe formar parte de un estilo de vida saludable, ya que aumentan su energía y mejoran el proceso de aprendizaje y su concentración. Además, ayuda a evitar el sobrepeso, ya que sacian su apetito y no llegan a las comidas principales con tanta hambre.
Según la Asociación Española de Pediatría, los niños de entre 1 y 12 años deben realizar cinco comidas al día. Una de estas comidas es la merienda, que debe ser equilibrada y nutritiva.
Pero puede suceder que con el transcurso de los días y del año se nos terminen las opciones y se haga un poco monótona o que se aburra de comer las mismas cosas.
No es tan difícil transformar una merienda común en una saludable.
Por eso hoy te doy algunas sugerencias para la preparación de meriendas nutritivas y variadas a lo largo del curso.
Puedes combinar sabores y texturas, esta es una manera de ayudar a aquellos niños que consumen alimentos limitados o repetitivos.
- Crujientes salados: Almendras, mezcla de nueces, popcorn bajo en grasa y sodio, galletas de granos enteros con hummus.
- Crujientes dulces: Barra de granola baja en calorías.
- Suaves salados: palitos de queso, pan integral de granos enteros y queso
- Suaves dulces: Yogur natural, fruta, batido de frutas con yogur natural.
También puedes combinar grupos de alimentos, puede ser una estrategia más sencilla y rápida de variar saludablemente las meriendas.
- Lácteo + frutas o vegetal: yogur con fruta en trozos. Los lácteos hasta los 3 años se aconsejan que sean enteros y luego ya se puede optar por los semidesnatados o desnatados.
- Fruta o vegetal + cereal o granos: hojuelas de maíz sin azúcar con pasas de uva o mezcla de almendras y una fruta, también puede ser una porción de bizcocho casero y una fruta (1 vez a la semana). Es importante incluir los frutos secos en su alimentación porque son alimentos ricos en vitaminas, minerales y grasas saludables, pero deben evitarse en niños menores de 3 años por el riesgo de atragantamiento.
- Proteína + cereal o granos: pan o galletas integral con atún o pollo
- Lácteo + cereal o grano: rebanada de pan con queso o yogur natural o bajo en grasa con granola.
- Proteína + fruta o vegetal: bocadillo con pan integral, jamón o atún o pollo, tomate y lechuga
Algunas recomendaciones:
- Incluir siempre una botella de agua en cada merienda, evitando los jugos por su contenido alto en calorías y azucares, lo ideal para la hidratación es el agua ya sea con o sin gas.
- Evitar la bolletería industrial, y alimentos con alto contenido calórico, grasas o azucares.
- Preparar la vianda el día anterior para no caer en la compra de alimentos poco saludables.
- Planificar la merienda semanal junto a tu hijo y prepararla juntos, de manera que aprenda su valorar esos alimentos que prepararon con mucho cariño y también a reconocerlo como un hábito saludable.
- Utilizar envases o tuppers adecuados, que permitan conservar correctamente los alimentos que lleva.