La playa se llama Choroní y el espía “Garbo”
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Su verdadero nombre era Joan Pujol García pero durante su riesgoso ejercicio usaba el seudónimo de “Garbo”. Tuvo una brillante carrera como espía. Fue un doble agente, tan brillante, que su temeridad llegó hasta convencer a los alemanes que el desembarco real se iba a realizar por Caláis y que lo de Normandía era solo un señuelo. Por ello, Hitler asignó más armamento en la protección de Caláis que en la de Normandía. En realidad, fue su habilidad la que posibilitó aquél crucial desembarco. Sin él, no habría llegado el célebre Día D.
Era hombre de confianza para los alemanes pero, en realidad, el arma secreta de los británicos. Un doble agente experto en el peligroso arte del engaño y está considerado el espía más importante de la Segunda Guerra Mundial.
74 años se cumplen de esa inmensa acción militar que fue el punto de inflexión de la guerra y contribuyó a la victoria de los aliados en la que Garbo, “Arabel” para los alemanes, jugó un papel clave.
Los historiadores sostienen que “Garbo es el ejemplo primordial de cómo se le da información incorrecta al enemigo para usarla en beneficio propio”. Él lideró una red de espionaje falsa de más de 20 personas, los alemanes le pagaron miles de dólares sin saber que les estaba mintiendo todo el tiempo y mandando basura. Tan es así, que al final de la guerra hasta le dieron una medalla. Fue una historia muy arriesgada de valor y genialidad.
Los alemanes le dieron un curso de espionaje y, sin conocer el inglés, se ganó a los británicos. Los primeros hasta lo condecoraron y los segundos lo reclutaron para las más delicadas operaciones de guerra…y también lo premiaron en 1944 con la Orden del Imperio Británico, de manos del propio rey Jorge VI “por sus servicios a la causa Aliada”. Ese mismo año, le otorgaron la Cruz de Hierro, una distinción raramente entregada a espías y que requería la aprobación personal del propio Hitler. El historiador Vince Houghton, curador del Museo Internacional del Espionaje, en Washington, lo explica con una sola y certera frase: “No sólo les dio a los ingleses mucha información buena, sino que también les dio a los alemanes mucha información mala”.
Era catalán, de madre católica y padre liberal. Comenzó sus estudios en una escuela de la Hermandad de los Maristas y, de adolescente, pasó a un colegio católico en Barcelona (España).
Algunos lo llamaron “el titiritero nazi”; otros, “el héroe invisible”. Mezclaba datos verdaderos con ficción bien construida, todo procedente de supuestos valiosos informantes que él mismo se inventaba y que sirvieron para estructurar cientos de mensajes que circulaban durante la guerra.
Después de fingir su propia muerte en Angola por malaria, un buen día se mudó a vivir a Venezuela, donde adquirió la nacionalidad y con ella una cierta protección de los nazis sobrevivientes que pudieran perseguirlo. Obviamente, temía represalias. Concretamente, se instaló con sigilo en el estado Zulia donde administró una modesta librería del centro comercial en Lagunillas en los años 60/70. Hay versiones de que también pudo regentar un cine, un hotel o una librería.
Ya en Venezuela, vivió en varias zonas del país y era un apasionado de las costas del Caribe. Se maravilló con los exóticos paisajes y se propuso nunca más salir de ellos. Pujol asumió una nueva identidad y permaneció “en la oscuridad”, hasta que lo rescata el político inglés Rupert Allason, quien consiguió localizar al elusivo Garbo tras una larga y laboriosa búsqueda. De visita en Inglaterra es recibido por el Príncipe Felipe, Duque de Edimburgo, en 1984. Aprovechó también para reunirse en el Club de las Fuerzas Especiales con antiguos compañeros del MI5 (*), quienes daban a Garbo por muerto desde finales de los años cuarenta.
A los 76 años de edad, Joan Pujol García murió en Caracas el 10 de octubre de 1988. Fue enterrado poco después, tal como dejó ordenado en vida, en el hermoso pueblo costero de Choroní, estado Aragua.-
*(*)* *El Servicio de Seguridad (en inglés: Security Service), más conocido como MI5, es un servicio de inteligencia del Reino Unido que principalmente se dedica a la seguridad interna del país.*