Dolor, sufrimiento, pero también confianza y esperanza
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Es un proyecto ambicioso, pero vale la pena. El objetivo es crear la primera estatua de cerámica –de un metro de altura- de la carmelita María Felicia Guggiari, quien como religiosa adoptó el nombre de María Felicia de Jesús Sacramentado, pero popularmente se la conoce como Chiquitunga.
La idea partió de Daniel Rolón, un conocido artista de la localidad paraguaya de Areguá, quien se puso como meta desarrollar esta imagen inédita a modo de ofrenda para la misa de beatificación que se celebra este 23 de junio, reproduce un reportaje de Última Hora sobre esta iniciativa.
¿Pero cuál es la motivación? Algunos podrían interpretar esta acción como una más de las tantas que se están desarrollando en Paraguay con motivo de la beatificación de Chiquitunga. Pero detrás de esta propuesta de arte y devoción hay también confianza y esperanza en medio de una situación cargada de dolor y enfermedad.
En ese sentido, según trascendió, Daniel tiene un hijo de 37 años de nombre Pedro Jacinto y que sufre diabetes. Es por ello que decidió encomendarle al joven la confección de un molde con el busto de Chiquitunga. El toque final de la ofrenda se lo dará la esposa de Daniel, madre de Pedro Jacinto, de nombre Cirilia, quien se encargará de pintarla.
“Mi hijo tiene una infección en la pierna de una herida y se le complica porque tiene diabetes. Por eso vamos a hacer. Él va a hacer porque es el más valé (expresión local) de todos”, comentó a ese medio este ceramista con 50 años de trayectoria, quien formó una familia de artistas que pasa sus días entre arcillas y cerámicas.
El sueño de Daniel y su familia es que finalmente esta escultura –de características únicas- quede pronta a la brevedad y que sea aceptada por los organizadores de la beatificación en el estadio de la Nueva Olla, del club Cerro Porteño, para que esté presente durante ese momento único. En este caso, el empeño y las ganas ya ganaron el primer partido.
¡Pronto el retrato de Chiquitunga!
En las últimas horas también trascendió que otra de las obras artísticas que estaban en marcha para honrar a la primera beata de Paraguay logró concluirse. Se trata de un retrato de Chiquitunga a manos del artista Koki Ruiz, quien recibió más de 70.000 rosarios para recrear la imagen, da cuenta La Nación.
“Queremos que todos los rosarios que llegaron tengan un lugar que estamos realizando. Estimo que fácilmente llegaron a 70.000 los rosarios, que recibimos a través del convento de las Carmelitas, el Arzobispado y las parroquias”, expresó Ruiz, en la 800 AM, reproduce La Nación.
El artista se mostró emocionado y confesó que se trató de la obra más importante que realizó en su vida. Anteriormente también había sido el protagonista de la creación del retablo de maíz que se colocó junto un altar con las figuras de San Ignacio y San Francisco de Asís durante una de las misas del papa Francisco en 2015 cuando visitó el país sudamericano.
El objetivo es que este retrato pueda permanecer en un futuro santuario, por lo cual hizo referencia a una técnica para la conservación.
“Para preservar de lluvias y sol ponemos un aislante a los rosarios, que así se van a poder preservar, no cómo el maíz y el coco que indefectiblemente se deterioran”, señaló.
La cuenta regresiva ya está instalada y estas expresiones artísticas lo único que hacen es confirmar como la popular Chiquitunga, una de las tantas mujeres gloriosas paraguayas, ha calado hondo en el corazón de sus compatriotas, pero también en el del resto de los latinoamericanos.
Con información en base a Última Hora y La Nación
