La heroína de las inundaciones es Joana, una madre de 40 años que puso a salvo a su hija pero murió al tratar de ayudar a su hijo.El tenista Rafa Nadal sorprendió al mundo entero al aparecer entre los voluntarios que ayudaban al desescombro y las tareas de recuperación de Sant Llorenç de Cardessar, la población de la isla de Mallorca (Baleares) que ha quedado arrasada por las lluvias torrenciales que cayeron la noche del miércoles. Nadal, la estrella mundial del tenis, siempre ha mostrado su solidaridad con los más desfavorecidos, pero en este caso se trata además de una desagria ocurrida muy cerca de su lugar natal y residencia habitual, la población de Manacor.
La madre que murió por salvar a sus hijos
Este desastre ha provocado 10 muertos, entre ellos una mujer que murió al intentar salvar la vida de sus hijos. Se trata de una muerte heroica.
Esta mamá estaba en su coche cuando se vio alcanzada por la corriente de agua. Viajaba con su hija y su hijo. Lo primero que hizo fue poner a salvo a la niña (de 7 años) y regresó al automóvil para hacer lo mismo con el niño, de 5. Lamentablemente, Joana, farmacéutica de 40 años, perdió la vida y todavía hoy los equipos de rescate están buscando al pequeño, que sigue desaparecido en la zona de Son Carrió.
En cuatro horas de la madrugada cayeron más de 200 litros por metro cuadrado y discurrió con furia por un antiguo torrente varios kilómetros. Arrasó tres poblaciones. En cambio, Manacor, que queda a pocos kilómetros, solo experimentó unas lluvias de 20 litros por metros cuadrado.