El prelado explicó a la revista “Bunte” detalles del encuentro y subrayó la importancia de la familia para el enfermo, del que apenas se tienen noticias.
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El próximo día 29 de diciembre se cumplirán 5 años del terrible accidente que sufrió el piloto alemán Michael Schumacher en las pistas de esquí de Meribel, en los Alpes franceses. Poco se sabe de su evolución ya que la familia prefiere permanecer en silencio y dedicarse a los cuidados que precisa ahora la estrella de Fórmula 1.
Sin embargo, de forma sorprendente el silencio se ha roto y de forma positiva gracias a una persona poco dada al cotilleo y la acción de los paparazzi. Nada menos que el Prefecto de la Casa Pontificia de la Santa Sede y secretario personal de Benedicto XVI, Georg Gänswein, ha sido quien ha transmitido las noticias más recientes sobre “Schumi”.
El arzobispo alemán, que en su día fue instructor de esquí, ha concedido una entrevista a la revista “Bunte” (el semanario del corazón en Alemania) y en ella ha explicado, entre otras cosas, cómo fue su visita al piloto siete veces campeón del mundo.
“Me senté frente a él, lo toqué con ambas manos y lo miré. Su cara, como todos sabemos, es la típica cara de Michael Schumacher; solo que se ha vuelto un poco más rellena”, explicó el arzobispo.
Monseñor Gänswein manifestó su profundo cariño hacia el enfermo, que ahora tiene 49 años: “Siente que a su alrededor hay gente que lo ama, que se preocupa por él y, gracias a Dios, mantiene alejado al público demasiado curioso. Una persona enferma necesita discreción y comprensión”. Schumacher esta permanentemente acompañado de su esposa Corinna, que en todo este tiempo ha dado grandes muestras de amor y fortaleza, y de sus dos hijos.
Ha trascendido además, que tanto Corinna como los hijos del matrimonio viajaron a Roma en verano de 2017 y fueron recibidos por el Papa Francisco. La visita de Gänswein a Schumacher se habría producido con anterioridad, en verano de 2016.
“La familia -explicó monseñor Gänswein- es el nido protector que Michael necesita desesperadamente. Su esposa es el alma de la familia“. Aquel día de 2016 no fue un hecho aislado y el sacerdote sigue en contacto estrecho con ellos: “Por supuesto que incluyo a Michael Schumacher y a su familia en mis oraciones. La Navidad es la fiesta del nacimiento de Cristo, del amor divino hecho hombre. Sentirlo es bueno y necesario”, ha declarado.
Michael Schumacher cumplirá 50 años el próximo 3 de enero de 2019 y, mientras tanto, su hijo Mick, de 19 años, ya ha anunciado su incorporación a la Fórmula 2 con intención de seguir los pasos de su padre, para lo cual quiere estar bien preparado como piloto. Así lo señala la prensa alemana de estos últimos días, incluida “Bunte”.
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