Viaje Apostólico en Panamá. En el Ángelus, el Pontífice recordó la difícil situación de Venezuela y tuvo un gesto especial para recordar la memoria de los 21 jóvenes cadetes asesinados como consecuencia de la explosión de un carro bomba en las instalaciones de la una escuela policial de Bogotá
Para ayudar a Aleteia a continuar su misión, haga una donación. De este modo, el futuro de Aleteia será también el suyo.
“Acá no nacen de nuevo solo los que podríamos llamar “beneficiarios primeros” de vuestros hogares; aquí la Iglesia y la fe nacen y se recrean continuamente por medio de la caridad”, dijo el papa Francisco este domingo 27 de enero de 2019, durante su visita a la Casa del Hogar El Buen Samaritano, Juan Díaz, una fundación promovida por la Iglesia panameña para ayudar a los jóvenes y adultos pobres con SIDA. “Estar hoy con ustedes es para mí un motivo para renovar la esperanza”.
Francisco escuchó el canto de un niño que le cantó la oración simple de San Francisco. Luego dijo al ver la obra de caridad de la casa con los enfermos de VIH, la mayoría jóvenes: “Es fácil confirmar la fe de unos hermanos cuando se la ve actuar ungiendo heridas, sanando esperanza y animando a creer”.
A su llegada, fue recibido en la entrada de la estructura por los cuatro directores de instituciones eclesiásticas que ayudan a los jóvenes (Casa Hogar El Buen Samaritano, Centro Juan Pablo II, Hogar San José y Kkottongnae Panamá). 60 jóvenes asistidos por los cuatro centros están presentes en el patio. Entre ellos, varios jóvenes salvados de la prostitución y de la calle.
En esta casa, el Papa habló del evangelio en el que le preguntaron a Jesús: ¿Quién es mi prójimo? (cf. Lc 10,29). “Él no respondió con teorías, ni hizo un discurso bonito o elevado, sino que utilizó una parábola ―la del Buen Samaritano”.
“El prójimo es una persona, sobre todo un rostro que encontramos en el camino, y por el cual nos dejamos mover y conmover: mover de nuestros esquemas y prioridades y conmover entrañablemente por lo que esa persona vive para darle lugar y espacio en nuestro andar”.
Sostuvo que el rostro del prójimo, “es rostro que revela nuestra humanidad tantas veces sufriente e ignorada”. “Es rostro que incomoda hermosamente la vida porque nos recuerda y pone en el camino de lo verdaderamente importante y nos libra de banalizar y volver superfluo nuestro seguimiento del Señor”.
Después de un breve saludo de bienvenida del Director de la Casa Hogar El Buen Samaritano, Juan Díaz, el Padre Domingo Escobar, la presentación de un video y una coreografía, el Papa pronunció su discurso y siguió las palabras introductorias al recital del Angelus.
“Gracias a todos ustedes por el ejemplo y generosidad; gracias a sus Instituciones, a los voluntarios y a los bienhechores. Gracias a cuantos hacen posible que el amor de Dios se haga cada vez más concreto y real, mirando a los ojos de los que están a nuestro alrededor y reconociéndonos como prójimos”.
El Papa también rezó el Ángelus. Ahora que vamos a rezar el Ángelus, los confío a nuestra Madre la Virgen. Le pedimos a Ella, que como buena Madre sabe de ternura y de projimidad”.
El Papa recuerda la grave situación de Venezuela
“Aquí en Panamá, he pensado mucho en el pueblo venezolano al que me siento particularmente unido en estos días. Ante la grave situación por la que atraviesa pido al Señor que se busque y se logre una solución justa y pacifica para superar la crisis, respetando a los derechos humanos y deseando exclusivamente el bien de todos los habitantes del país. Los invito a rezar para poner esta intercesión ante el amparo de Nuestra Señora de Coromoto, patrona de Venezuela.
Francisco recuerda a los cristianos asesinados en Filipinas
El Pontífice encomendó a Cristo y a la Virgen a las víctimas del atentado terrorista perpetrado este domingo en la catedral de Jolo en Filipinas, donde al menos 19 personas han puerto y 48 han resultado heridas. La mayoría de las víctimas civiles eran personas que acudieron a la misa de la mañana. “Reitero mi más firme reprobación que enluta de nuevo esta comunidad cristiana y elevo mis oraciones por los difuntos y por los heridos. Qué el Señor príncipe de la paz convierta el corazón de los violentos y conceda a los habitantes de la región una serena convivencia”.
El gesto del Papa en memoria de jóvenes cadetes que murieron en ataque terrorista en Bogotá
El Papa también recordó el “atentado terrorista” en la Escuela de Policía General Santander, ubicada al sur de Bogotá, Colombia, que ha dejado 21 muertos, incluido el presunto atacante, y 68 heridos. Tragedia que enluta a Colombia. “Estos jóvenes fueron ofrenda en la misa. Y como recuerdo de ellos, me permito en este Angelus, nombrarlos, y cada uno en el corazón, en silencio, diga esa palabra que se suele decir en estos institutos cuando se nombra a un muerto, presente, que esté ’presente’ delante de Dios”. Y los nombró uno a uno.
Luego, después de haber bendecido la primera piedra de los dos centros de asistencia y el intercambio de regalos, regresó en automóvil a la Nunciatura Apostólica, donde almuerza con los miembros del séquito papal.
