Casi la mitad de las lenguas que se hablan están al borde de la desaparición
Para ayudar a Aleteia a continuar su misión, haga una donación. De este modo, el futuro de Aleteia será también el suyo.
¿Qué sentiría usted si la lengua que le heredaron sus padres estuviera en peligro de extinguirse y fuera de los últimos hablantes de ella en la faz de la Tierra? Algo de pánico, desde luego. Porque una lengua es un universo. El universo de sus hablantes, donde cabe todo: el amor, Dios, la amistad y el arte. Una lengua es un tesoro.
Al lanzar el lanzar el Año Internacional de las Lenguas Indígenas en Perú, la Unesco, a través de su representante en el país andino, Magaly Robalino, advirtió –a Perú (donde se hablan 48 lenguas por 55 pueblos indígenas, de la cuales 21 están en peligro) y al mundo– que casi la mitad de las 6.700 lenguas que se hablan en la actualidad están al borde de la desaparición y que 90 por ciento corre el riesgo de sepultarse en el olvido antes de que termine este siglo.
Es más, según la representante de la Unesco en Perú, cada dos semanas desaparece una lengua de la superficie del planeta. Y añadió algo fundamental: “Con cada lengua que desaparece se va una parte de la vida humana sin posibilidad de retorno. Se extingue no solo un vehículo de comunicación, sino una cultura, un acervo de conocimientos, un sistema de pensamientos, una forma de ver el mundo, un sistema de relaciones y valores familiares y una fuerza de ciudadanía”.
Los pueblos originarios, principales afectados
La extinción de una lengua conduce a la desaparición de varias formas de patrimonio cultural inmaterial, expresa en un artículo la prestigiosa revista National Geographic (Natgeo). En la investigación que presenta sobre el tema, Natgeo refiere que, actualmente, de las 6.700 lenguas que son habladas en el mundo, 96 por ciento son habladas solo por tres por ciento de la población del planeta.
Y ese tres por ciento, lógicamente, pertenece en su mayoría a pueblos originales, poblaciones indígenas (a los que pertenecen esas dos lenguas que cada semana desaparecen). “Es importante resaltar que los idiomas indígenas no solo son métodos de comunicación, sino también sistemas amplios y complejos de conocimientos. Son fundamentales para la identidad de los pueblos indígenas, la conservación de sus culturas y su percepción y visión del mundo, y también son una expresión de libre determinación”, refiere en su artículo Natgeo.
Sin embargo, esto no es privativo de los pueblos originarios: en Europa, por ejemplo, más de veinte lenguas se encuentran en peligro de extinción inminente.
Globalización lingüística
El origen de este acelerado deterioro de las lenguas de los pueblos originales es, desde luego, la globalización, que ha venido a imponer algunas –pocas– lenguas dominantes entre las que destaca el español (como segundo idioma más hablado en el planeta) y el inglés (como el idioma universal de los negocios y las transacciones comerciales).
“Muchos de los idiomas que se hablan en el mundo no sobrevivirán a la sociedad de la información digital globalizada”, explica la Alianza Tecnológica Multilingüe de Europa (META, por sus siglas en inglés) en su informe Lenguajes Europeos en la Era Digital producto de una serie de investigaciones denominadas “Libros Blancos”, en las que trabajaron 200 expertos quienes calcularon que, al menos, 2.000 idiomas “se enfrentan a la extinción en las próximas décadas”.
Las regiones del mundo con un mayor número de lenguas en peligro de desaparición son Melanesia, el África Subsahariana y Norte y Sudamérica. Es preciso decir, sin embargo, que se puede hallar lenguas en situación de peligro en la totalidad de las regiones del planeta y en casi todos los países del mundo.
México, un caso paradigmático
México es uno de los países con la mayor riqueza cultural y lingüística del mundo, al contar con 68 lenguas originarias y 364 variantes lingüísticas. Sin embargo, 70 por ciento de estas variantes lingüísticas está en riesgo de desaparecer por la discriminación que enfrentan sus hablantes, según el Instituto Nacional de Lenguas Indígenas (INALI).
En México, además del español, que es el idioma oficial y que hablan 95 por ciento de los mexicanos, se hablan 68 lenguas de los pueblos indígenas, entre ellas: tutunakú o totonaco, ayyujk o mixe, bats’il k’op tseltal, otetzame o zoque, Kickapoo, tének o huasteco, wixárika o huichol, chatino, chinanteco, ixil, bot’una o matlatzinca, entre muchas otras.
El INALI ha considerado importante que cada variante lingüística sea tratada como lengua, por lo tanto es importante recalcar que México cuenta con 364 lenguas o variantes lingüísticas, con 68 agrupaciones lingüísticas y once familias lingüísticas que corresponden a la siguiente agrupación: Álgica, Yuto-Nahua, Cochimí-Yumana, Seri, Oto-Mangue, Maya,
Totonaco-Tepehua, Purépecha, Mixe-Zoque, Chontal de Oaxaca, Huave.
En México ha habido un movimiento –reforzado por la presente administración federal que encabeza Andrés Manuel López Obrador—para reconocer los pueblos indígenas y sus lenguas. La Ley General de Derechos Lingüísticos de los Pueblos Indígenas indica que todos los idiomas indígenas de México son lenguas nacionales al igual que el español, por lo tanto tienen la misma validez y es el Estado quien debe buscar mecanismos para la protección, promoción, preservación, uso y desarrollo de las mismas. Aunque falta mucho por hacer.
América Latina, enorme diversidad en riesgo
La protección de una lengua puede salvarla de la extinción; un ejemplo de ello es el záparo, lengua amazónica de Ecuador. El záparo llegó a contar con 20.000 hablantes en el siglo XIX; en la actualidad tan sólo tiene cinco. Recientemente, la cultura zápara y su idioma han sido declarados patrimonio inmaterial de la humanidad con el fin de salvar la lengua de una muerte segura.
En América Latina existen actualmente 522 pueblos indígenas que van desde la Patagonia hasta el norte de México, pasando por distintas áreas geográficas como Amazonía, Andes, Caribe Continental, Baja Centroamérica y Mesoamérica. Por países, Brasil es el que tiene más diversidad de pueblos indígenas con 241, seguido por Colombia, con 83 (México con 67 y en cuarta posición Perú con 43.
México, Bolivia, Guatemala, Perú y Colombia reúnen 87 por ciento de los indígenas de América Latina y el Caribe. El restante 13 por ciento de la población indígena reside en veinte distintos países. Destacan cinco pueblos con varios millones de personas como los Quechua, Nahua, Aymara, Maya yucateco y Ki’che, y seis con poblaciones entre medio y un millón de habitantes como los Mapuche, Maya q’eqchí, Kaqchikel, Mam, Mixteco y Otomí.