El modelo de cuerpo que promocionaba la marca dejó de ser atractivo: demasiado fuera de la realidad
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Desde hace más de 20 años, todos los diciembres daba de qué hablar el desfile de lencería de Victoria´s Secret. ¿Quiénes serían los nuevos “ángeles”? ¿Cómo sería el famoso brassiere joya de más de un millón de dólares? ¿Quién cantaría en el show? Pero de un tiempo para acá, la gran pregunta ha sido: ¿Realmente este desfile se ha adaptado a los nuevos tiempos y al concepto de belleza de hoy?
Aunque muchos podrían pensar que los hombres eran los que más veían este show por televisión, realmente la mayoría eran mujeres. Y este 2019, la marca tomó la decisión de cancelar el desfile como solía ser, porque el rating ha venido descendiendo año tras año drásticamente.
“Hemos decidido repensar el tradicional desfile de Victoria’s Secret. En 2019 y de aquí en adelante, nos centraremos en el desarrollo de contenido emocionante y dinámico y en un nuevo tipo de evento que se difundirá entre nuestros clientes en otras plataformas pegadas a la actualidad”, dijo en un comunicado Les Wexner, CEO de la compañía L Brands (casa matriz de la firma de lencería).
En estos momentos, lo que queda claro es que las mujeres no nos sentimos ni identificadas ni inspiradas por esos cuerpos tan delgados. Tampoco nos interesan sus dietas y ejercicios extremos para esta pasarela, preferimos cuerpos más normales como otras marcas nos están presentando en sus campañas de trajes de baño de verano. Y no, tampoco se trata de ir al otro extremo de la obesidad extrema (que es también un problema de salud), pero sí figuras más reales y sanas, con curvas y no ultra tonificadas.
Además, hace tan sólo semanas Victoria´s Secret también se vio metida en un escándalo porque, en un intento de parecer “inclusivos” en cuanto a tipos de cuerpo, dijeron que estaban incluyendo a su primera modelo de “talla grande” y era Barbara Palvin, ¡que es talla 38! Luego vino la española Lorena Durán, otra modelo que según ellos es “plus size”, ¡y es talla 42!
Sin duda, Victoria´s Secret representa un ejemplo emblemático por la popularidad de su show anual. Sin embargo, son muchísimas marcas las que carecen de diversidad y las mujeres cada día nos hacemos consumidoras más exigentes que no aceptamos que nos impongan modelos irreales supuestamente “perfectos” y, en vez de estereotipos con alas, preferimos tiendas y diseñadores con los pies un poco más en la tierra.