A un año del tsunami en la Iglesia de Chile debido al tema de los abusos sexuales, la visión de algunas mujeres en la Iglesia de hoy Hace un poco más de un año, el Papa Francisco recibía la renuncia de los 34 obispos chilenos después de la reunión que sostuvieron con él durante una semana en Roma. Este hecho marcó el inicio formal de la crisis de la jerarquía de la iglesia. Cultura de encubrimiento, excesivo clericalismo y el elitismo, son algunas de las reflexiones que el Santo Padre compartió con los obispos.
Read more:
Obispos de Chile plantean su renuncia y ponen sus “cabezas” en las manos del Papa Francisco
Después vino la carta del papa al Pueblo de Dios que Peregrina en Chile; donde hace un llamado a los laicos a tener un carné de adulto en la fe y una mayor incorporación y participación de las mujeres en la iglesia chilena.
Es así como Francisca San Martín, laica, asumió la cancillería del Arzobispado de Mujeres, nació Mujeres Iglesia y algunas religiosas y consagradas han ido asumiendo distintos cargos al interior de Vicarías u organismos.
“El debate no es sobre cargos más o roles en la Iglesia. Sino cómo se valore la mirada femenina, que tiene que ver con la forma en que se está en el mundo, con la forma de hablar, de orar, la forma de vincularnos con Dios”, dijo Carolina del Río teóloga y magíster en teología de la Universidad Católica, periodista, docente del Centro de Espiritualidad Santa María.
Este comentario de Carolina viene de las declaraciones que hizo el recién nombrado obispo auxiliar por Santiago, padre Carlos Irarrázaval, en una entrevista a CNN y donde ante la pregunta de si le gustaría un rol más relevante en la iglesia para las mujeres, Irarrázaval respondió que a su juicio ellas ya lo tienen. “Quizás a ellas mismas les gusta estar en la trastienda, puede ser”, y agregó “Es cierto que en la última cena no había ninguna mujer sentada a la mesa y eso tenemos que respetarlo también. Jesucristo tomó opciones y no lo hizo ideológicamente”.
Ante la ola de críticas el recién nombrado obispo envío una carta pidiendo disculpas. Para la Hermana Nelly León, capellana de la cárcel de mujeres que visitó el Papa Francisco en Chile, dijo en un panel en la Universidad Santo Tomás “La carta no es suficiente. Porque lo que dijo no tiene justificación teológica ni social”. Varios días después en una entrevista a Encuentro manifestó: “Las mujeres hemos sido de segunda categoría en la Iglesia. Y esto aún sabiendo que llevamos, mayoritariamente, el peso de la evangelización a las comunidades”.
Para María Teresa Medina, agente pastoral de la parroquia Jesús Salvador de Lo Hermida, “¿Cómo hemos logrado cambios en mi parroquia con una gran presencia de mujeres? Ha sido estando en terreno, liderando proyectos voluntarios como los comedores. Nosotras no vamos a la iglesia por el cura, sino que por nuestra fe. Si ponemos en una vereda a los hombres y en otra a las mujeres, no vamos a avanzar. El trabajo es comunitario de todos y todas”.
Read more:
“No hay lugar para abusos ni abusadores”: Así reaccionó Chile tras expulsión de Karadima
Read more:
Abusos: Radiografía a la iglesia chilena hoy y la reaparición del cardenal Ezzati