Pueden tener buena intención, pero normalmente no son las mejores consejeras para quien se desahoga sobre sus dificultades matrimoniales
El sitio norteamericano AllProDad, dedicado a temas de paternidad, familia y vida matrimonial dirigidos particularmente a los hombres, publicó recientemente material sobre las personas que, incluso con buena intención, no suelen ser buenas consejeras cuando alguien desahoga sus problemas matrimoniales con ellas.Teniendo estos consejos en cuenta, piensa con calma antes de compartir eventuales momentos de crisis matrimonial con:
1Parientes próximos
Porque tienden a tomar partido, quedando un tanto “ciegos” en relación al otro cónyuge, además de que pueden desarrollar un rencor que no ayuda a nadie.
2Personas del sexo opuesto
Porque pueden crear vínculos emocionales con el confidente, alimentados por las críticas al otro cónyuge y por intentos de consuelo que sólo han a empeorar la situación del matrimonio.
3Personas que ya tienen una opinión negativa sobre el matrimonio
Porque las personas que tienen una visión parcial o incluso egoísta del matrimonio tienden a generalizar su opinión negativa como si fuese aplicable a todo y cualquier matrimonio.
4Personas que ya tienen mala opinión de tu cónyuge
Porque esas pessoas, que ya tenían alguna antipatía sean cuales fueren las razones, ahora seguramente no van a querer animarte a luchar por tu matrimonio.
5Personas cínicas
Porque las personas que acostumbran a hacer ironía sobre el amor y los sacrificios que exige, no tendrán equilibrio, objetividad y serenidad suficientes para ayudar a valorar justamente el amor que pasa por una fase difícil.