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3 errores a evitar cuando hablas con una pareja que está buscando un embarazo

TERAPIA MAŁŻEŃSKA
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Mathilde De Robien - publicado el 16/08/19
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Algunos consejos sobre lo que es bueno decir en una conversación si no queremos empeorar las cosas

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Cuando un esposo y una esposa hacen saber que están tratando de quedar embarazadas, suelen escuchar muchas cosas. Primero están las recomendaciones interminables… especialistas, hierbas, dietas, tratamientos… y luego está la típica historia sobre “la pareja que no tenía hijos y que, el mismo día en que comenzaron el proceso de adopción, supieron que estaban embarazados”.

Olivier Mathonat, subdirector de estudios en Ircom (un instituto de educación superior en Francia), habla sobre esto en su testimonio llamado “Espera y Esperanza, el viaje de una pareja sin hijos”, recientemente publicado en francés.

Entonces, ¿qué deberíamos decir a las parejas que intentan sin éxito tener hijos? Aleteia se reunió con Mathonat para aprender más sobre lo que es útil para las parejas que sienten profundamente “esta ausencia que se vuelve demasiado presente”.

3 errores a evitar

Para Mathonat, el primer error consiste en querer saber absolutamente todas las razones de esta situación, y en particular las posibles causas médicas, que ciertamente pueden llevar a preguntas indiscretas e hirientes. “El hecho de que hablemos de un tema íntimo como la infertilidad no significa que estemos obligados a revelar todo sobre nuestra intimidad”, dice.

El segundo error es el de proponer soluciones: contactar a un médico en particular, modificar su estilo de vida, usar un método determinado… Si bien podemos pensar que ese consejo nos da una cierta autoridad, o un pretexto para abordar el tema, sin embargo, generalmente no es deseado y a veces es perjudicial.

“Cuando la familia y los amigos de una pareja comienzan a preguntarse si la ausencia de un hijo podría estar haciéndolos sufrir, ellos ya llevan meses sufriendo intensamente”, señala. Sin mencionar que no existe un método milagroso que funcione para todos. Es un error creer que lo que “funcionó” para una pareja funcionará para otra.

La tercera trampa es minimizar u obviar la situación con comentarios como: “Deja de pensar tanto en eso” o “No es para tanto; todo saldrá bien”. Esta es simplemente una forma de negarse a ver el sufrimiento de la pareja y descartarlo con una frase rápida.

Una invitación a una mayor profundidad

Por otro lado, no deberíamos creer que estas parejas que sufren no quieren discutir el tema. A menudo están agradecidos si los que los rodean abordaran el tema con más empatía y profundidad. Por esta razón, Mathonat invita a los familiares a acercarse a la pareja, a ir más allá de sus primeras reacciones para buscar lo que la pareja realmente está experimentando, a mostrar un oído más atento y más receptivo que decirle a la pareja “solo tienes que hacer esto…”

“Necesitamos que se nos escuche más que solo escuchar recomendaciones sobre lo que debemos hacer, a quién debemos ver y cómo debemos hacerlo. Nada es más valioso para nosotros que un oído atento, la sensibilidad de alguien que dice: ‘Estás en mis pensamientos’ o ‘¿Qué necesitas?'”, dice Mathonat.

Al mismo tiempo, no debería convertirse en el único tema de conversación. No reduzcamos a una pareja que está tratando de quedar embarazada a este deseo solamente. “Necesitamos que nos escuchen sin juzgar ni aconsejar, para sentir que lo que hacemos siempre interesa a quienes amamos, incluso si nuestras vidas son diferentes”.

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