Tuvo una bienvenida masiva en su pueblo, instancia llena de júbilo y oraciones. Su caso hizo activar la Alerta Emilia por primera vez en Ecuador
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El calvario llegó a su fin. Es que los 9 días en los que la pequeña Anahí Jazmín Miranda, de dos años de edad, permaneció secuestrada y alejada de su familia ha generado fuerte indignación en Quito (Ecuador).
Según medios locales, todo comenzó el pasado 6 de agosto cuando la niña se encontraba en un centro comercial al sur de la capital ecuatoriana. En ese momento, en base a testimonios de testigos, Anahí fue tomada por dos mujeres jóvenes que la subieron a un taxi y se la llevaron.
Es que en el centro comercial funcionaba un local de internet que solía ser frecuentado por la niña ya que su madre trabajaba en el local. Pero las dos mujeres involucradas en este caso también habían acudido días antes al lugar.
“Ellas eran conocidas para la niña y esa cercanía hizo que sea más fácil llevársela sin que Anahí ponga resistencia”, expresó la ministra de Gobierno María Paula Romo, reproduce El Comercio.
Estas declaraciones fueron hechas luego del reencuentro de la niña con sus padres y tras 9 días de secuestro. Las dos mujeres involucradas fueron detenidas. Una de ellas con prisión preventiva por presunto delito de secuestro; la otra, por ser menor, con internamiento preventivo.
Pero los días en que Anahí estuvo alejada de su familia fueron una verdadera pesadilla. Su padre Xavier, por ejemplo, manifestó que durante los nueve días del secuestro se dedicó solamente a buscar a su hija por toda la ciudad y que estuvo pegando volantes en iglesias, tiendas y otros lugares, señala El Comercio.
También hubo un intenso trabajo de colaboración con los vecinos, la policía y difusión de fotos a través de las redes sociales.
Finalmente, luego de 10 días, la niña fue entregada sana y salva a su familia. “Fueron días muy duros, agradezco a Dios por tener a mi hija nuevamente en mis brazos”, expresó emocionada Paola, la madre de la pequeña.
Paola y Xavier ya están con su hija Anahí. Este es el primer caso en que usamos la #AlertaEmilia en el Ecuador
Gracias a quienes compartieron y muchas gracias a todas las unidades de la @PoliciaEcuador que hicieron un gran trabajo para traerla de regreso.#BuenTrabajoPoliciaEc pic.twitter.com/7fpYWRBQMq— María Paula Romo (@mariapaularomo) August 15, 2019
Alerta Emilia
El caso de Anahí no solamente será recordado por haber tenido un final feliz. Pues se ha transformado en el primero que ha funcionado con la Alerta Emilia, un protocolo vinculado a la búsqueda de niños y adolescentes que fue implementado en 2018 en Ecuador, convirtiéndose en el primer país de Sudamérica en hacerlo.
…Inmediatame se activaron los protocolos de búsqueda y localización de personas desaparecidas para dar con la ubicación de la menor y las personas responsables de este ilícito.. pic.twitter.com/wSHU4fxxSy
— Policía Ecuador (@PoliciaEcuador) August 15, 2019
Entre los principales lineamientos de esta alerta temprana se encuentra –luego de recibida la denuncia- la difusión de la imagen del menor desaparecido a través de la plataforma Facebook (también medios de comunicación y otros canales) a lo largo de 160 kilómetros a la redonda. El nombre de esta alerta hace referencia a Emilia Benavides, una niña que fue secuestrada y asesinada en la localidad de Loja en 2017.
En tanto, en base a testimonios, la activación de esta alerta motivó a que le cortaran el cabello y cambiaran la ropa, pero la complicidad de una hermana de las involucradas fue clave para dar con el paradero de Anahí.
Pueblo Unido fue una fiesta
En las últimas horas la pequeña Anahí recibió otro gran abrazo, el de su gente en la localidad de Pueblo Unido, al sur de Quito. Fue ahí donde tuvo una cálida bienvenida en medio del júbilo y hasta de oraciones.
¡Anahí volvió con los suyos! Y su caso, que pasará a la historia por ser el primero vinculado a la Alerta Emilia, emociona.
Recemos por todas las familias que viven situaciones similares en cuanto a secuestros o desapariciones, pero que no se resigan y siguen perseverando en la búsqueda.
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