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Psicólogo, psiquiatra, psicoterapeuta … ¿O tal vez a un confesor o director espiritual? Atención porque no es lo mismo ser asistido por uno o por otro. Descubre en esta guía a qué se dedican cada uno
El psicólogo
¿Quién es?
Es un licenciado en Psicología.
¿Qué hace? ¿A qué se dedica?
En primer lugar, está autorizado para trabajar en el campo del diagnóstico psicológico: solo él puede realizar pruebas diagnósticas y emitir opiniones y certificados psicológicos. El alcance de sus actividades es amplio y depende de su especialidad: Psicología de las organizaciones y del trabajo; Psicología del marketing y del consumidor; Psicología clínica y de la salud; Psicología forense; Psicología de la educación y del desarrollo; Psicología del deporte; Psicología social; Psicología familiar y de la pareja; Sexología; Neuropsicología…
Ante este importante número de especialidades, es lógico comprender que los psicólogos pueden desempeñar su trabajo en diferentes lugares: en empresas, escuelas, hospitales, centros de orientación familiar, consultorios matrimoniales y de pareja, tribunales, centros deportivos, Policía…
Así pues un psicólogo puede intervenir si tienes algún problema de salud que te está afectando emocionalmente; si hay algún conflicto o situación familiar difícil de gestionar; o una dificultad en el aprendizaje y desarrollo de un niño, o también, a la hora de buscar trabajo y realizar una entrevista laboral.
Sin embargo, en el área de la salud mental, un psicólogo puede dar consejos y consultas pero no llevará a cabo una terapia a largo plazo, a menos que también sea un psicoterapeuta, como se analiza a continuación.
¿Cuándo es conveniente pedir cita?
Cuando necesitamos un certificado, un diagnóstico psicológico u una opinión. Y también cuando estamos luchando con algunas dificultades en un área específica: problemas sociales, relacionales, con nuestra familia, en el trabajo; incapacidad para lidiar con el estrés; luto…
El psicoterapeuta
¿Quién es?
Completó los cursos en Psicoterapia en la especialidad elegida. También habría hecho la carrera de Psicología, pero no necesariamente. Muchos buenos psicoterapeutas podrían haber completado previamente otros estudios como Pedagogía, Sociología, Filosofía o Teología. Además de la capacitación, también se sometió a su propia terapia e hizo prácticas en instalaciones médicas.
¿Qué hace? ¿A qué se dedica?
Lleva a cabo la psicoterapia, una forma de tratamiento para las dificultades mentales, que se basa en el uso de métodos específicos y probados para lograr una mejora de la persona o personas que se someten a la terapia: una persona soltera, un matrimonio o toda la familia. Su duración puede ser muy diferente, desde unas pocas reuniones durante varios días hasta varios años.
El psicoterapeuta trabaja en la corriente de su elección: los más populares son humanistas, conductuales-cognitivos, psicodinámicos o sistémicos. Difieren, por ejemplo, en la forma en la que llevan a cabo las sesiones del tratamiento o en los nombres de los mecanismos que gobiernan a las personas. Es imposible indicar la mejor tendencia de la terapia: todos tienen el mismo objetivo: ayudar a aquellas personas que tienen dificultades, pero lo hacen de diferentes maneras.
¿Cuándo es conveniente pedir cita?
Cuando las dificultades que experimentamos afectan a nuestra vida. Cuando observamos síntomas depresivos, ansiedad, pensamientos obsesivos, trastornos del sueño y de la alimentación. Cuando los problemas cotidianos o las experiencias del pasado nos hacen sentir una fuerte tensión mental que nos dificulta nuestra vida presente.
El psiquiatra
¿Quién es?
Es un médico especializado en Psiquiatría.
¿Qué hace? ¿A qué se dedica?
Realiza diagnósticos psiquiátricos de trastornos mentales en los pacientes que los padecen. Con este fin, además de recopilar el historial médico, a menudo también ordena pruebas de laboratorio o imágenes: sucede que los síntomas asociados con una enfermedad mental tienen su origen en enfermedades somáticas, por ejemplo, enfermedades del sistema endocrino.
Según el diagnóstico, el psiquiatra puede recomendar a su paciente llevar a cabo un tratamiento farmacológico y es el indicado para recetarle los medicamentos que necesite. En caso de problemas graves, puede darle de baja por enfermedad o derivarle a un hospital. A menudo, el tratamiento farmacológico se lleva a cabo en paralelo con la psicoterapia.
¿Cuándo es conveniente pedir cita?
Cuando los síntomas que experimentamos claramente desorganizan nuestras vidas. Cuando la ansiedad o los síntomas depresivos se convierten en una carga grave que afecta nuestro funcionamiento en el trabajo o en el hogar. Es necesario buscar ayuda cuando surgen sensaciones inusuales: escuchar sonidos o ver imágenes imperceptibles para otras personas, creer que nos están siguiendo, que alguien controla nuestros pensamientos o conspira contra nosotros.
El confesor
¿Quién es?
Es un sacerdote de la Iglesia Católica.
¿Qué hace? ¿A qué se dedica?
La tarea de cada sacerdote es ante todo el servicio sacramental, incluido el sacramento de la penitencia y la reconciliación, comúnmente llamada confesión. En el sacramento de la penitencia, el penitente (la persona que se va a confesar) confiesa sus pecados y se une a Dios y a la Iglesia, lo que resulta en el perdón del castigo eterno causado por los pecados mortales.
¿Cuándo es conveniente pedir cita?
Siempre, cuando cometemos un pecado grave: consciente, voluntario y con respecto a un asunto importante. Además, vale la pena usar regularmente el sacramento de la penitencia para experimentar la gracia sanadora de Dios y para formar nuestra conciencia.
Es una buena práctica encontrar un confesor permanente, un sacerdote a quien confesamos regularmente, gracias a lo cual es posible un trabajo en profundidad sobre nuestros vicios o debilidades.
La confesión está destinada a limpiarnos de nuestros pecados, y no solo a mejorar nuestro bienestar. No es necesario pues que hablemos de nuestras dificultades vitales esperando que el sacerdote resuelva nuestros problemas. Su papel es perdonar los pecados y no atender cuestiones para las que no está capacitado.
Director espiritual
¿Quién es?
Un clérigo o un laico con preparación teológica que nos acompaña en el camino de la fe.
¿Qué hace? ¿A qué se dedica?
Ayuda a profundizar nuestra relación con Dios. Apoya el camino del desarrollo espiritual, ayuda a reconocer los movimientos espirituales y responder a ellos adecuadamente. Indica cómo abrirse más al Espíritu Santo.
Si es un sacerdote, puede o no ser un confesor regular de la persona que está siendo dirigida.
¿Cuándo es conveniente pedir cita?
Cuando surge en nosotros el deseo de “algo más” en nuestra vida espiritual. Cuando nos preocupamos por profundizar nuestra fe y fortalecer nuestra relación con Dios. La dirección espiritual es particularmente importante en el período en que tomamos decisiones importantes en la vida con respecto a la vocación o el futuro del camino de nuestra fe.
También es valioso cuando nuestro compromiso con la vida espiritual va más allá del mínimo necesario: es bueno tener una persona que nos guíe en un camino de espiritualidad específico. Mientras confesamos nuestros pecados a nuestro confesor, con nuestro director espiritual hablamos sobre nuestras inquietudes internas, formas de oración y reflexiones al leer la Palabra de Dios. Las reuniones pueden ser regulares o ad hoc.