Solo un 12% piensa que se puede confiar en un extraño.
Según la encuesta Mundial de Valores (2010-2014) alrededor del 70% prefiere ser precavido y cuidadoso con el trato con los demás y solo un 12% piensa que se puede confiar en un extraño.
En los países de mayor confianza, como los Países Bajos, Suecia, Nueva Zelanda o Australia, aquellos que confían superan el 50% de la población. Sin embargo, países como Chile se ubica dentro del 30% de los países con menor confianza social en el mundo, siendo el quinto más desconfiado de Latinoamérica y el más desconfiado, junto a México, de los países de la OCDE.
¿Cómo vencer la desconfianza?
Aquí algunos consejos que ayudan a construir puentes:
1.- Sea fiable: antes que pedir confianza, hay que darla. Uno debe aprender a cumplir su palabra. Cancelar o no cumplir con lo prometido genera pequeñas brechas en la fiabilidad.
2.- Sea constante: para construir la confianza debe cumplir con su palabra más de una vez.
3.- Sea transparente: cuando exista algún tipo de confusión evalúe si es necesario entregar más detalles, de esa manera la otra persona tendrá toda la información que necesita; no omita datos que puedan contribuir a una buena colaboración.
4.- Sea leal: la lealtad es la capacidad de proteger a los demás y defenderlos. Debe ser leal en presencia y, sobre todo, en la ausencia de los otros.
5.- Sea honesto: si es capaz de decir siempre la verdad, demuestra que realmente le importa su relación con la otra persona.
6.- Cumpla sus promesas: sea realista y no prometa más de lo que pueda cumplir. Cuando no pueda cumplir con la promesa, hable con la persona y explíquele por qué no puede cumplir lo prometido.
Tenga cuidado con autoengañarnos. A veces pensamos que hemos sido honestos, pero no ha sido así, “otros observan nuestras acciones y lo que decimos; y se dan cuenta de que no hemos sido honestos. Si vives observando la realidad como desearías que fuera, no podrás comprender la perspectiva de los demás con respecto a determinados comportamientos”, explica el sacerdote Hugo Tagle.
Es importante también que se analice por qué actúo de forma poca honesta, “preguntarse si en verdad me gusta comportarme así, lo más probable que la respuesta sea negativa. Sin embargo, es bueno hacerse esa pregunta para comprender las razones de mi actuar”, recomienda el sacerdote.