Un nuevo ataque terrorista ha dejado catorce muertos en Burkina Faso el pasado domingo 1 de diciembre. Un comando de una decena de hombres ejecutó a sangre fría a los fieles, entre ellos niños, así como al pastor de una iglesia protestante en el este del país
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“Una iglesia protestante de Hantoukoura, en el departamento de Foutouri, provincia de Komondjari, fronteriza con Níger, ha sido víctima de un ataque mortal perpetrado por hombres armados no identificados”, anunció el Gobierno de la región de Fada N’Gourma en un comunicado. El ataque, que tuvo lugar durante el culto dominical, se desarrolló en torno al mediodía y ha “ocasionado catorce muertos y múltiples heridos”.
Aumento de los ataques contra cristianos
Una fuente de seguridad anunció a la agencia de prensa francesa AFP que la agrupación militar de Foutouri ha iniciado una operación de “redadas” para encontrar el “rastro de los asaltantes”. Según esta fuente, salieron “huyendo a bordo de motocicletas” inmediatamente después de la masacre.
Los atentados contra las iglesias cristianas se han intensificado en 2019 en Burkina Faso. Se han formado grupos autónomos en el norte del país, en la provincia de Soum. Se extienden ya por el este a lo largo de la frontera con Níger.
En el mes de octubre, la Federación de Iglesias y Misiones Evangélicas (FEME, por sus siglas en francés) anunció ya un contundente llamamiento a la comunidad internacional. Al menos 41 cristianos han muerto únicamente en el año 2019 en ataques dirigidos.
