Se ha ganado al público joven y a muchos mayores con su testimonio. Aquí lo contamos…
Para ayudar a Aleteia a continuar su misión, haga una donación. De este modo, el futuro de Aleteia será también el suyo.
En una escuela de Australia, el sacerdote católico y estrella del pop Rob Galea (Malta, 1981) se sorprendió al escuchar que unos niños de primaria equiparaban a Jesús con Hércules.
Este converso –que entre los 14 y los 17 años probó de todo: alcohol, drogas, robo—ha dedicado buena parte de su vida adulta, tras aprender música y luego ordenarse sacerdote en la diócesis de Sandhurst (Australia), a llevar a Jesús a los demás.
Además de ejercer su ministerio, es conocido mundialmente por sus canciones (escritas e interpretadas por él) mediante las cuales ha encontrado una forma de catequizar a los jóvenes “en el idioma que entienden”. De hecho, ha participado en dos Jornadas Mundiales de la Juventud interpretando canciones suyas.
En la tormenta está Dios
No es fácil explicar el Evangelio a través del pop, sin embargo Galea se ha ganado al público joven y a muchos mayores con su testimonio: antes de descubrir a Jesús estuvo muy cerca, metido dentro del infierno.
“La gran diferencia entre la felicidad y la alegría es la alegría de saber que atravesaremos la tormenta, pero Dios caminará con nosotros a través de ella”, dijo Galea en una entrevista reciente realizada por Rob Cullivan y publicada por Angelus News.
Hasta la fecha ha lanzado ocho álbumes al mercado discográfico, el último fue en 2019: “Coming home” (Volviendo a casa). Su paso por el abismo y su recuperación por la oración lo ha contado en el libro de 2018, “Breakthrough: A Journey from Desperation to Hope ” (Ave Maria Press).
El libro, cuyos derechos para el cine han sido comprados y pronto saldrá como una película de Hollywood, es su historia de conversión y, al mismo tiempo, el testimonio de alguien que ha dicho en un documental biográfico que si tuviera mil vidas, en las mil volvería a ser sacerdote.
Las oraciones de una madre
En los años duros, Galea pensó en el suicidio: “mientras estaba inquieto en mi cama, sólo vi dos maneras de salir de mi miseria. Una era que alguien, en algún lugar, me tendiera la mano y de alguna manera me salvara, o dos, acabar con mi propia vida”.
Fueron las oraciones y las lágrimas de su madre –como las de Santa Mónica con San Agustín—las que lo sacaron del marasmo. Luego experiencias de grupos de oración en Malta y, finalmente, en Australia, de la mano del obispo Joseph Grech fue ordenado sacerdote.
Ahí mismo, en Australia, ha echado raíces y trabaja con jóvenes a través de la evangelización y la música. Como el sacerdote irlandés Ray Kelly en el programa “British Got Talent”, el padre Galea concursó en 2015 –vestido con vaqueros y tenis Converse—en la versión australiana de este show: “The X Factor”.
Era un serio concursante pero abandonó el concurso después de una fuerte batalla para balancear las demandas del programa con sus compromisos pastorales. Finalmente, vencieron sus ocupaciones de sacerdote y su ministerio con los jóvenes.
Vivir en la esperanza
Galea define su estilo inspirado por el rock, la música electrónica de baile, el pop, el folk y le gustan artistas tan diversos como U2. DJ Skrillex, Keane y el cantante irlandés Damien Rice.
“A veces tengo una Biblia conmigo, a veces tengo el corazón roto”, dijo a Cullivan de Angelus News sobre su método de composición. “Algunas canciones me toman meses para escribir, algunas canciones me toman minutos para escribirlas”.
Y terminó dando su carnet de identidad: “Estoy enamorado de Jesús”, dijo. “Cuando pienso en Jesús, estoy alegre, vivo y lleno de esperanza”.