El gesto solidario de un agente para servir a una familia que está pasando por un dura situación económica.
En tiempos como los que estamos viviendo es clave “rescatar de los demás aquellos valores que morirían sin nosotros”. Y es que un tweet de la Policía Nacional española fue el motivo por el que se dejó ver la importancia de mirar más allá de los hechos inmediatos con la intención de querer comprender y encontrarse con la mirada de los demás.
🚨Un padre de familia sustrae 4 potitos en un supermercado de #Zaragoza. Es sorprendido y llaman📞a la @policia
El agente👮♂️ que acude, viendo la necesidad del hombre, paga la comida infantil y lo deja ir#MicrocuentosReales#FelizLunes#SomosTuPolicía https://t.co/VsZF1vgDsg pic.twitter.com/gUmfKr10H4
— Policía Nacional (@policia) June 8, 2020
Según relata La Voz de Galicia, un padre de familia fue arrestado después de que un guardia de seguridad en un supermercado de Zaragoza lo descubriera robando 4 potitos. Desde el mismo local llamaron a la Policía.
Cuando los agentes acudieron al lugar de la escena, entrevistaron a los protagonistas y conocieron con más detalle lo que había ocurrido. Comprendieron la necesidad de ese joven hombre: padre de familia, en el paro y sin comida para alimentar a sus hijos. Ante esta situación los agentes decidieron no multarlo y dejar que se lleve el alimento infantil. De hecho, fueron ellos mismos los que se hicieron cargo de pagar el importe de los 4 potitos.
Conmovido, el agente se puso en el lugar de aquel hombre que está pasando por una situación crítica. Por eso, en esta actuación primó la humanidad, al punto de romper las reglas que deberían esperarse frente a un robo, un hecho que claramente violaba la ley.
Y es que esta obra de amor ha arrojado un resultado mucho más eficiente. Un mensaje claro de que podemos perder muchas cosas, pero no esa humanidad que se deja ver cuando se manifiesta a través de estos acontecimientos. Cada uno desde el lugar que le toca puede hacer algo para servir mejor a su comunidad.
En una sociedad que en los últimos meses ha sido afectada por la pandemia y los problemas económicos emergentes para muchas familias, estos gentes apostaron por la solidaridad para mejorar la situación de una familia. Saben que por pequeño que sea, cualquier gesto a dar esperanza a quienes más la necesitan.
A este joven hombre no solo le dieron lo que era básico para sus hijos. Le han devuelto su humanidad, algo que no olvidará nunca. Lo han reconocido por su derecho a ser tratado como un ser humano sin importar dónde se encontraba o lo que había hecho. Primero es alguien, una persona que necesita ayuda.
En estos tiempos de pandemia es importante ir al encuentro de los que no tienen a nadie, de los que son víctimas de quedar fuera de todo cuidado. Y para ello no solo se necesita de la empatía para ponerse en el lugar del otro. Necesitamos sentirnos parte de la humanidad, porque el sentirse excluido es el verdadero mal, más que la falta de dinero.
Este hombre no solo necesitaba un recurso material, necesitaba un corazón que le comprenda. Con este gesto la Policía ha demostrado que cada uno hace lo que debe hacer para acompañar el sufrimiento ajeno y que no se puede ir por la vida distraído, ya que si queremos construir una sociedad más humana es necesario buscar hacer algo por los que nos rodean.
Conocer intelectualmente el problema de la pobreza, no significa comprenderla. Tenemos que vivirlo y compartirlo. Cuando somos capaces de interiorizar la vivencia del otro y experimentar lo que el otro experimenta, es cuando podemos tomar mejores decisiones.
Lo verdaderamente valioso de esta noticia es que la policía ha brindado no solo una ayuda inmediata en algo concreto como el alimento para aliviar la necesidad de una familia, sino sobretodo devolverle algo de su dignidad humana; un verdadero derecho individual que tenemos todos muy superior a cualquier cosa material. Al final, ¿qué no poseemos que no hayamos recibido de otro?