¿Te has preguntado por qué es tan reconfortante ver a las personas pintar? La ciencia del cerebro tiene algunas respuestas
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Hay personas en Instagram y Youtube que van ganando popularidad grabándose a ellas mismas mezclando tinta, escribiendo caligrafía, decorando galletas o haciendo cualquier número de cosas sencillas, pero inexplicablemente fascinantes. Son tranquilizados y animadoras. Pero ¿por qué nos gustan?
Tiene que ver con nuestras neuronas espejo. Estas han sido descubiertas accidentalmente por científicos italianos que estudiaban a los monos. Cuando un investigador agarró su comida, las partes del cerebro del mono asociadas a la actividad motora de alcanzar alimentos se iluminaron.
Pasa que los seres humanos tienen neuronas que se disparan cuando ejecutamos ciertas acciones, y un subconjunto de esas neuronas también se dispara cuando estamos solo observando a las personas realizar acciones (en un cerebro sano, es decir, sociópatas y personas con un trastorno de personalidad narcisista tienen la habilidad de la neurona espejo limitada -ellas son fisiológicamente menos capaces de ser empáticas).
Las neuronas espejo son básicamente el mecanismo físico del cerebro para la empatía. Estas están en juego cuando lloras si tu marido está llorando, o cuando te agachas cuando tu hijo se raspa la rodilla.
Tu cerebro realmente está, de una forma muy real, sintiendo parte de lo que la otra persona está sintiendo. Las neuronas espejo ayudan a explicar por qué la alegría es contagiosa.
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Sensación de bienestar personal
La empatía no está reservada solo para sentir las emociones de otras personas. La razón por la cual nos encanta ver a las personas hacer arte es porque, de una manera muy real, nuestros cerebros sienten que somos nosotros quienes hacemos el arte.
Es por eso que es tan intensamente gratificante.
Especialmente para una persona que no es especializada en, digamos, pintura en acuarela, o simplemente no tiene energía mental o física para crear algo, puede ser algo maravilloso ver a alguien hacer eso. Te sientes casi tan bien como si estuvieras haciendo eso también.
Entonces, ahorra que sabes eso, ¡abraza! Tu cerebro está reaccionando a esos vídeos exactamente como debería.
Mira la caligrafía adictiva del diseñador gráfico Seb Lester, o los videos de mezcla de tinta extrañamente fascinantes de la artista Annette Labedzki. Puedes haber encontrado la manera favorita de relajarte después de un día especialmente estresante.
Aquí puedes “degustar” uno de los vídeos del calígrafo Seb Lester:
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