El ejército azerí bombardeó, en palabras del arzobispo armenio Pargev Martirosyan, “los valores espirituales de los armenios”
Para ayudar a Aleteia a continuar su misión, haga una donación. De este modo, el futuro de Aleteia será también el suyo.
Pocas horas después de que se haya consumado la enésima injusticia histórica contra el pueblo armenio (entre ellas la destrucción de la catedral armenia, una de las principales preocupaciones es qué va a suceder con el patrimonio religioso, iglesias y monasterios, que van a quedar de la parte azerí.
En esta última contienda de 44 días, Azerbaiyán sale ganando. El acuerdo, propiciado con la mediación rusa, supone la pérdida para Armenia de 7 ciudades de Artsakh (Nagorno Karabaj). Son territorios que, desde 1994, estaban bajo control armenio.
Destrucción de la Catedral de Cristo Salvador
Durante esas fatídicas semanas ha habido decenas de muertos, de uno y otro lado, heridos y daños materiales. Entre estos últimos, probablemente el más doloroso, ha sido la destrucción de la catedral de Ghazanchetsots, también conocida como catedral de Cristo Salvador, en la ciudad de Shushí.
El ejército azerí bombardeó, en palabras del arzobispo armenio Pargev Martirosyan, “los valores espirituales de los armenios”. Armenia es la primera nación del mundo en adoptar el cristianismo como religión oficial en el siglo IV.
Te puede interesar:
Nagorno-Karabaj, la catedral armenia arrasada
“Crane” de Komitas Vardapet
Entre las ruinas de la catedral armenia se eleva la música de un violoncelo. El músico armenio-belga Szak Avanesyan toca “Crane” de Komitas Vardapet. Entre los bancos destrozados y los escombros, el violoncelista entona la preciosa música de este sacerdote, músico y compositor, considerado el salvador de la música armenia. Komitas falleció en 1935 en un psiquiátrico de París.
https://www.facebook.com/watch/?v=264348124857447
El sacerdote fue arrestado en su parroquia de Estambul cuando comenzó el genocidio armenio. Estuvo en un campo de concentración y fue testigo de la brutal violencia que los turcos desataron contra los armenios a partir de 1915. Desde entonces, su voz extraordinaria alabada por músicos, artistas y aficionados, se apagó. Tras esa experiencia nunca más volvió a cantar.
Genocidio armenio
Las crónicas dicen que ni siquiera volvió a hablar. Se estima que el Genocidio armenio se cobró la vida de entre un millón y un millón y medio de personas asesinadas a manos del Imperio otomano entre 1915 y 1918.
La catedral de Shushí ya fue reconstruida a finales de los 90. Con 35 metros de altura, es un emblema de Artsakh. Durante la guerra de Nagorno Karabaj, Azerbaiyán usó el templo como almacén para sus misiles, ya que no se iba a atacar ese sitio. Cuando Shushí fue liberada por el Ejército de Defensa de Nagorno Karabaj el 9 de mayo de 1992, la catedral, edificada a finales del siglo XIX, fue reconstruida.