Construida en una mina, la Catedral de Sal de Zipaquirá, Colombia, hace una gran apuesta tecnológica para celebrar un cuarto de siglo del templo actual
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En Colombia, muy cerca de la ciudad de Bogotá, se encuentra una imponente construcción subterránea, dentro de una mina de sal. Se trata de la emblemática Catedral de Sal de Zipaquirá, a 180 metros bajo tierra, uno de los principales atractivos turísticos del país.
El templo actual está conmemorando 25 años con importantes innovaciones digitales, entre ellas dos espectáculos de luces láser Lumein Spei y Creatus, traducidos del griego al español como Luz de esperanza y Creación. Estos shows fueron lanzados el pasado 16 de diciembre y se proyectan en la majestuosa nave central de la catedral, donde se celebran las Eucaristías.
La primera maravilla de Colombia
La obra arquitectónica, tal como se conoce actualmente, se inauguró en 1995, tres años después de cerrada la anterior catedral. Esto por fallas estructurales ocasionadas por la explotación de las minas de sal. Tiene más de 8.500 metros cuadrados de extensión. Además, esculturas talladas en el mismo mineral. Lo mismo, un apasionante recorrido por la vida de Jesús, que le han valido el título de la Primera maravilla de Colombia.
Visitantes
Los visitantes –que superan los 13 millones en este cuarto de siglo– se maravillan observando las tres naves que representan el nacimiento, vida, muerte y resurrección de Jesucristo. Especialmente la central en la que se levanta la cruz más grande bajo tierra, de 16 metros de alto por 10 metros de ancho.
Además de la majestuosa cúpula, el arquitecto colombiano Roswell Garavito diseñó un viacrucis con sus 14 estaciones a lo largo de 386 metros. Aquí los fieles católicos encuentran el recogimiento ideal para la reflexión.
Nuevo servicios digitales
La celebración de esta imponente catedral incluye una app para dispositivos móviles y la renovación de su página web (www.catedraldesal.gov.co), con el fin de garantizar mayor agilidad en la navegación, nuevos servicios para el turista como la compra de boletas, videos de alta calidad y un llamativo recorrido 360 grados en alta definición que dan la oportunidad de conocer esta maravillosa obra desde cualquier parte del mundo.
“Poder celebrar 25 años de funcionamiento es motivo de felicidad y gratitud a los 128 mineros que gracias a su fe y dedicación labraron esta majestuosa obra”, dijo Orlando Sotelo, gerente de la Catedral de Sal.
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Garantía
El esfuerzo por mejorar la experiencia de los visitantes y preservar su salud de todos se complementa con la entrega del sello Safe Travels del Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC) como garantía de la implementación de medidas de bioseguridad. Esto representa un respaldo de seguridad para que los turistas continúen visitando la Catedral, especialmente en momentos de gran recesión en el sector turismo de Colombia a causa de la pandemia.
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La construcción de una maravilla
La historia de esta construcción de gran valor arquitectónico, religioso y minero no solamente es un homenaje a quienes realizan el oficio de la extracción de la sal, también es un homenaje a los grupos indígenas colombianos que ocuparon este territorio, al centro del país.
Para los muiscas, pueblo indígena que habitaba la región antes de la llegada de los españoles, la extracción de la sal fue una de sus principales actividades y les permitía hacer intercambio comercial. La devoción de los campesinos que en el siglo XX facilitó la construcción de la primera capilla, hacia 1932.
Así es la catedral:
Virgen de Guasá
En agosto de 1954 fue inaugurada la primera iglesia, a 80 metros bajo tierra, con una imagen de la Virgen de Guasá, patrona de los mineros de la zona, en su entrada. Ese fue el templo que se debió cerrar porque la explotación de la mina de sal en los yacimientos ocasionó daños en su estructura.
En ese momento empezó el proyecto de la Nueva Catedral de Sal, el cual llegó a sus 25 años y los está celebrando con varias innovaciones tecnológicas para seguir sorprendiendo a sus visitantes, que llegan de todo el mundo atraídos por esa majestuosa obra y las demás atracciones del complejo turístico que la rodean.
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