Tiene 24 años y toca el cielo con la punta de los dedos. Sico, el pseudónimo que ha adoptado este joven para conservar el anonimato, escala hasta la cima de los santuarios más hermosos. Retrato de un joven que no conoce el vértigo enamorado de las viejas piedras góticas
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Sico es un joven francés discreto. Y con razón, ya que la pasión que practica desde hace un año y medio es punible a ojos de la ley. Además, ya ha sido arrestado más de una vez. Sin embargo, cuando miramos las fotografías que cuelga en su cuenta de Instagram, comprendemos bien por qué lo hace. ¡Casi siente uno envidia de poder estar ahí!
“Hay un silencio increíble cuando subes a las alturas”
Todo comenzó hace casi dos años, cuando uno de sus amigos le confesó haber intentado subir al tejado de la iglesia de Saint-Sulpice de París, cubierta de andamios. Intrigado, Sico apostó que intentaría hacer lo mismo. Ahí arriba, la sensación es una maravilla. “Hay un silencio increíble cuando subes a las alturas. Te alejas de los ruidos de la ciudad”, confiesa con emoción. Enamorado de la altitud, Sico decide proseguir con esta increíble aventura. En su activo ya cuenta con más de 200 monumentos escalados, entre ellos muchas catedrales.
Siempre acompañado de tres a cinco amigos por razones de seguridad, Sico no olvida nunca su cámara de fotos, una herramienta esencial para inmortalizar sus vertiginosas acrobacias. Este temerario joven no duda incluso en dormir toda la noche en las alturas para presenciar el amanecer mientras se toma su desayuno. Unas noches que no siempre son muy cómodas, pero que le recuerdan con placer sus años de escultismo. Aunque estas escaladas son algo fantástico, asegura que la práctica es peligrosa y que no puede efectuarse sin un mínimo de seguridad. “Estamos equipados con material de seguridad, cuerdas, etc.”, precisa Sico. Aunque él nunca ha tenido un accidente, admite que uno de sus amigos ya le dio un susto enorme. “Invito a los jóvenes a no reproducir esto de forma impulsiva”, intenta precisar.
En el corazón de la belleza de los edificios góticos
Entre los monumentos escalados, las iglesias y catedrales ocupan un lugar importante. Al estudiar la restauración de techumbres para monumentos históricos, Sico valora especialmente la belleza de los monumentos góticos. Siente, además, un apego particular por las catedrales de Amiens y de Reims, que encuentra impresionantes. Su amor por los edificios sagrados se explica también, sin duda, por su educación católica. Aunque la fe es importante para él, admite que no es muy practicante. “No soy muy asiduo, pero me he criado con la fe. Incluso fui monaguillo hasta que cumplí 18 años”, admite con pudor. A pesar de una fe tímida, no duda en homenajear a Jesús en una de sus fotos de Instagram. En lo alto de una grúa, muestra una sudadera con el nombre de Jesús estampado en la espalda. En el comentario de la foto escribe: “Jesús no dijo nunca que la vida sería fácil… ¡Pero prometió que Él estaría con nosotros todos los días!”.
En la actualidad, Sico se aventura más a subir a las cumbres que ofrece la naturaleza, aunque no descarta escalar de vez en cuando algunos monumentos. Hace poco publicó una foto en lo alto de la catedral de San Luis de Versalles. Puedes encontrar más imágenes asombrosas en su cuenta de Instagram.
Para ver algunas muestras de sus exploraciones, haz clic sobre la galería fotográfica: