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La Fundación Padre Hurtado ha decidido revitalizar, en el marco del Mes de la Solidaridad 2020, una campaña denominada #AnteojosParaVerlAlOtrx. Efectivamente, en conjunto con obras sociales como Hogar de Cristo, Universidad Alberto Hurtado, TECHO, Infocap o Servicio Jesuita a Migrantes (SJM), lo que se busca es que el proceso constituyente -que inició su trabajo en Chile en julio de 2021- busque dignidad y justicia para con los más vulnerables.
“En Chile existen 2,1 millones de personas que están en situación de pobreza, según la última encuesta Casen. Son personas invisibles que necesitan ser vistas en la nueva constitución”, se indica en un comunicado lanzado por Hogar de Cristo.
Es por ello que a través de esta campaña, que tiene vínculo con el famoso santo chileno Alberto Hurtado, se pide tanto a quienes votaron por los constituyentes, así como los propios constituyentes, un compromiso para garantizar los derechos sociales de los más necesitados.
La propuesta, que visualmente es fácilmente identificable con gafas de color verde a manera simbólica, cuenta con varios embajadores. Entre ellos también aparecen actores como Javiera Contador y Francisco Melo.
A través de las redes sociales se explica qué hacer para que cada uno pueda desde su lugar ponerse esos anteojos verdes. En definitiva, una invitación a tomar conciencia, actuar y abrirse a aquellos que habitualmente pasan inadvertidos.
Por su parte, con motivo del Día Nacional de la Solidaridad, que este 18 de agosto se celebra en Chile, el propio Comité Permanente de la Conferencia Episcopal de ese país publicó un mensaje.
“A nombre de los Obispos de Chile, queremos agradecer a todos quienes cada día sirven a sus hermanos en múltiples iniciativas y organizaciones solidarias”, se expresa.
Además de hacer referencia a la Encíclica Fratelli Tutti del papa Francisco, los obispos destacan el diálogo que se está desarrollando a nivel institucional con el fin de encontrar caminos de organización y convivencia que “atienda de mejor forma a la dignidad de las personas”.
“Sin embargo, para que este proceso dé buenos frutos, vemos indispensable cultivar una auténtica amistad cívica, que permita un diálogo en respeto mutuo y escucha verdadera”, se destaca.
“La solidaridad también nos abre al dolor de los otros más allá de nuestras fronteras. Nos preocupa actualmente, entre otras muchas realidades de aflicción, la situación que se vive en Haití y en Afganistán. Valoramos los gestos de solidaridad de parte de autoridades y de otros sectores, pero sin duda que podemos hacer mucho más. Creemos que un modo concreto de solidarizar con Haití, afectado por un nuevo terremoto y una crisis social permanente, es facilitar la regularización de la situación migratoria de miles de haitianos residentes en nuestra patria, abriéndoles la posibilidad de traer a sus hijos y familiares cercanos”, se indica en otros de los puntos del mensaje. En este caso, con un claro llamado a la acogida e integración.
