7 curiosidades de la Basílica de San Juan de Letrán

Todos los 9 de noviembre, la iglesia católica celebra la Dedicación de la Basílica de San Juan de Letrán, que fue la primera basílica en ser construida en Roma (sí, incluso antes que la Basílica de San Pedro). 

Su construcción comenzó en el año 313, luego que el emperador Constantino permitiera a los cristianos practicar su fe. 

¿Por qué celebrar un día de una basílica? Porque es "más que un edificio", no sólo es la casa del Señor, sino también un archivo histórico de quienes nos precedieron y sacrificaron, así como un legado físico sobre el cual se ha construido nuestra fe durante años.

“Honrando el edificio sagrado, se quiere expresar amor y veneración a la Iglesia romana que, como afirma San Ignacio de Antioquía, preside en la caridad a toda la comunión católica”, dijo el Papa Emérito Benedicto XVI en el 2008.

Los terrenos le pertenecían a la familia Laterani y pasaron a ser de dominio imperial en tiempos de Nerón. Allí había un palacio, el cual fue cedido posteriormente por elemperador Constantino al Papa Melquíades para que fuera su residencia oficial y construyera un templo.

Finalmente, el Papa San Silvestre consagró esta basílica el 9 de noviembre del año 324 al Santísimo Salvador del Mundo. Por eso, su nombre en realidad es Basílica del Santísimo Salvador. En su interior hay dos grandes capillas importantes: una para San Juan Bautista (a quien el Papa Sergio III le dedicó la basílica tras un fuerte terremoto en el año 846) y otra en honor a San Juan Evangelista (a quien el Papa Lucio II también le dedicó la basílica en el siglo XII).

Por ser la más antigua del mundo, madre y cabeza de todas las iglesias de Roma y el mundo, también se le da el título de Archibasílica.

La Basílica de San Juan de Letrán posee dos fachadas. La más solemne cuenta con las puertas originales de la Curia romana; y un segundo piso desde donde el Papa da su bendición cada Jueves Santo. Esta fachada data del siglo XVIII y está coronada por una imagen de Cristo. Su construcción la comenzó el Papa Clemente XII, quien está enterrado en la basílica (al igual que otros pontífices); y cuyo nombre fue grabado en la parte superior. 

La segunda fachada está junto al obelisco de Letrán (el más alto de Italia) y se orienta hacia el Coliseo y la Basílica de Santa María la Mayor. 

También se le conoce popularmente como Basílica del Divino Salvador, ya que cuando fue consagrada nuevamente en el año 787, una imagen del Divino Salvador derramó sangre al ser atacada.

Como el Papa es también el obispo de Roma, esta basílica es también la catedral de la capital italiana. Los oficios del Jueves Santo siempre se realizan aquí.

Varios incendios y terremotos a lo largo de la historia han puesto en peligro esta basílica; la cual ha sido reconstruida varias veces tratando de conservar -en la medida de lo posible- su forma y belleza original. 

Desde su creación hasta que los Papas se fueron a vivir a Aviñón (Francia) en el año 1400, la casa contigua a la basílica (el palacio de Letrán) fue la residencia papal. Actualmente, el Vicario de Roma es quien vive allí. También en 1929 el palacio de Letrán fue la sede del tratado de paz entre el Vaticano y el gobierno italiano (el famoso tratado de Letrán).

Si vas a Roma, ya entrar en la iglesia más antigua del mundo es maravilloso; pero también a unos pocos pasos de la Basílica de San Juan de Letrán está la Escalera Santa. Se dice que fue la madre de Constantino, Santa Elena, quien mandó a traer de Tierra Santa la escalera por donde Jesús subió para ser juzgado por Poncio Pilato. Los 28 escalones deben subirse de rodillas.