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"Esta pintura extraordinaria es un ejemplo fundamental de lo que hace de Botticelli un artista tan fascinante", declaró el presidente de Sotheby’s para Estados Unidos, George Wachter, que se dispone a vender en Nueva York, el próximo enero, este raro lienzo de Botticelli todavía en el mercado del arte y valorado en 40 millones de dólares.
Este lienzo, que representa a Cristo como "Varón de dolores" (Ecce Homo), ilustra el momento en que Cristo fue azotado poco antes de su crucifixión. La expresión triste y sombría del rostro intensifica este trágico episodio. Sin embargo, lo más sorprendente siguen siendo los diez ángeles que revolotean alrededor de su cabeza. ¿Qué hacen ahí? Basta con mirar lo que llevan en las manos: una escalera, una lanza, unos clavos, una esponja… Cada uno lleva en sus manos un instrumento de la Pasión. En lo alto del cráneo, Botticelli colocó la cruz con la que Cristo parece estar coronado. La presencia de esos instrumentos recuerda así el fiel sacrificio para el que Cristo se prepara e invita a la meditación. Si la mirada algo triste de Cristo prefigura el drama que le espera, las manos cruzadas sobre su pecho subrayan su significado.
Este lienzo, extremadamente conmovedor y raro en la producción del maestro, revela la espiritualidad intensa que motivaba a Botticelli en el final de su vida. En esta época, el artista estaba enormemente influido por el predicador florentino Jérôme Savonarole, famoso por sus enérgicas predicaciones en las que denunciaba los excesos de la Iglesia. Como compartía sus ideas, Botticelli se alejó de los temas mitológicos y poéticos que tenía por costumbre proponer y, en su lugar, se inclinó hacia la producción de lienzos sobre temas más austeros.
Este Ecce Homo, que va a ser expuesto en los próximos meses en Los Ángeles, Londres y Dubái, regresará luego a Nueva York para ser presentado allí antes de la gran subasta del 22 de enero.
