Para ayudar a Aleteia a continuar su misión, haga una donación. De este modo, el futuro de Aleteia será también el suyo.
La Navidad ya está casi ahí. Y estos hombres trabajan a contrarreloj para que este 24 de diciembre muchas familias tengan a su Niño Jesús reluciente. A ellos se los conoce como “cirujanos” y su noble tarea se basa en restaurar más de mil imágenes del personaje principal del pesebre.
Según consigna Los Tiempos, hay 10 artesanos que trabajan a esta hora en talleres o “clínicas” de la Feria Navideña local. A ese lugar llegan imágenes con desperfectos. Por ejemplo, niños que tienen dedos de yeso rotos, pies quebrados, desgastes, etcétera. Ahí también aparece una particularidad vinculada a los niños cuzqueños, que se caracterizan por sus cabelleras onduladas.
Detrás de esta reparación maratónica también se encuentra el caso de dos hermanos, Álex y Marcelo Jallasa, quienes llenan su jornada abocada a ofrecer respuesta a la cantidad de pedidos que tienen para para llegar con los arreglos, prosigue Los Tiempos.
Un regalo
También todo esto se da la mano con una linda tradición, tal cual cuenta uno de ellos:
“Las familias tienen la costumbre de que el Niño Jesús tiene que ser un regalo. Me han traído de 30 y 40 años de antigüedad para arreglar”.
Es por estos motivos que muchas personas prefieren la restauración de la imagen, antes que la adquisición de una nueva.
En tanto, mientras se aproxima la fecha clave de entrega, una vez más aquello del significado de regalar una imagen del Niño Jesús, nada más ni nada menos que una muestra de fe y esperanza, además de bendición para celebrar de la mejor manera la Navidad.
