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Inhóspita frontera norte entre Chile y Bolivia. Desde hace muchos meses esta definición ha sido más que acertada. Se trata de una zona andina ubicada a más de 3.600 metros sobre el nivel del mar, con temperaturas que suelen ser muy bajas y que se ha cobrado la vida de más de 20 personas (principalmente migrantes venezolanos) en los últimos de meses tratando de atravesar de un lugar a otro por pasos irregulares.
El drama que se vive en esa zona, con repercusión en el pequeño poblado chileno de Colchane, ha sido finalmente también plasmado en un documental llamado “Esperanza sin fronteras”.
Según recordó la Iglesia de Chile a través de su sitio web, lo que busca es presentar “impactantes y conmovedores relatos” de quienes están huyendo de otras situaciones complejas como las que se viven desde hace años en Venezuela.
“En el camino los han asaltado, les han robado todo, han estado a merced de mafias que lucran con su desesperación… vienen con hijos pequeños y adultos mayores deshidratados, con frío y al borde del colapso. Pero para ellos vale la pena arriesgar la vida para salir del propio país, vale la pena, si existe alguna chance de vida digna para ellos y sus familias”, se indica.
"No puede seguir muriendo gente", dice entre lágrimas otro de los entrevistados en el documental.
Una Iglesia que acompaña
El estreno del documental será el 18 de mayo y detrás se encuentra la participación del Arzobispado de Santiago. Al mismo tiempo, más allá del drama, también se muestra la labor humanitaria que ha venido realizando la Iglesia en Colchane. Por ejemplo, cómo la capilla “Nuestra Señora de Los Dolores” se ha convertido en albergue provisorio donde se ofrece alojamiento en colchonetas y alimentos.
“No podemos ir a dormir sabiendo que hay niños durmiendo en una plaza, con temperaturas bajo cero, que están llorando, que piden dormir. Tratamos de darles a esas familias una noche digna, porque desde que salen de Venezuela, es la dignidad lo que han perdido, porque les ha tocado dormir en la calle, comer comida vencida, que sacan de la basura”, expresa dos voluntarios y profesores llamados Mauricio González y Jazmín Sánchez, prosigue la Iglesia de Chile.
Pero también aparece la labor de otros “ángeles” (ver también informe publicado en Aleteia) que han estado desde el minuto cero atendiendo a los más vulnerables. Ya sea desde el trabajo del Obispado de Iquique como lo que hacen las hermanas Franciscanas Misioneras de María. Lo mismo la Congregación Misioneras de María Inmaculada Catalina de Siena.
Una “Mesa de Trabajo” para buscar soluciones
Otro de los objetivos del documental “Esperanza sin Fronteras” es unificar voluntades de diversas organizaciones de la sociedad civil, el Estado y también empresas privadas. Esto para lograr la conformación de una “Mesa de Trabajo” que pueda ofrecer soluciones a la situación de los migrantes en esa zona fronteriza.
En ese sentido, agrega la Iglesia de Chile, el anuncio de esta instancia de conformación de un espacio de trabajo entre diversas organizaciones (nacionales e internacionales) se anunciará de manera formal. Será en una conferencia de prensa el mismo día del estreno del documental.
