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Milagros tenía 14 años. Participaba de un retiro espiritual en su ciudad de La Plata cuando repentinamente sufrió una descompensación. Tras ser trasladada a un hospital falleció víctima, como indica el parte oficial, de un paro cardiorrespiratorio no traumático.
Las redes sociales rápidamente se hicieron eco de la bella estela que la niña dejó antes de su prematura muerte. Entre los mensajes más emocionantes se encuentra el de su mamá, Noelia:
«Alma mía. Vos llegaste primero a los brazos de la Virgen. Esperanos, preparanos el camino. Gracias por tanto amor y felicidad. Te amo. Gracias por existir» (sic).
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La tragedia ocurrió durante un retiro espiritual de Aventura La Plata, un retiro de alto impacto organizado para jóvenes de los últimos cuatro años de educación secundaria.
En el retiro, como los mismos organizadores expresan, se busca que «uno se mire hacia adentro y se haga preguntas que quizás en lo cotidiano no nos hacemos: ¿Cómo estoy? ¿De dónde vengo? ¿A dónde voy? ¿Qué sentido tiene mi vida? buscando dar respuestas desde la fe y la razón y enriquecer así nuestro espíritu con distintas enseñanzas que podrán ser útiles en la vida cotidiana».
Se trata de una «aventura» que desde hace años sorprende y motiva a cientos de adolescentes platenses, de múltiples colegios, que llevan su renovado apostólico a sus familias, amigos, colegios, clubes.
La comunidad de su colegio San Juan Bautista rezó una misa en su memoria. Y múltiples de sus allegados comparten desde entonces trazos de la identidad de Milagros, como la docente que compartió que «Mili era unas de esas alumnas que te permitía enseñarle más de la vida que de la materia».
«Muchos ya se han enterado, otros hemos estado juntos anoche en la convivencia de invierno, cuando después de celebrar la Eucaristía con alguno de los asesores, y mientras los chicos hacían un juego al aire libre, Milagros, una reciente aventurera de la zona oeste, se desvaneció», relató el obispo auxiliar de La Plata, monseñor Jorge González, quien acompaña los retiros.
«Se imaginan que ha sido un impacto muy grande para tantos chicos y chicas presentes, estuvimos juntos hasta la madrugada rezando, consolando…», completó.