Para ayudar a Aleteia a continuar su misión, haga una donación. De este modo, el futuro de Aleteia será también el suyo.
San Mauricio (en francés Saint-Maurice) es una ciudad histórica del cantón del Valais en Suiza. Lleva el nombre del gran líder romano de la legión Tebana que allí murió martirizado por su fe cristiana, junto a todos sus soldados.
Agaunum era el nombre antiguo de la actual Saint-Maurice. Su historia comienza alrededor del año 300 cuando Mauricio, Exuperio, Inocencio, Cándido y sus compañeros rechazan las órdenes impías del emperador de matar a cientos de inocentes.
La narración de "La Pasión de los Mártires de Agaune", de san Euquero de Lyon, presta a Mauricio estas palabras:
Son masacrados y enterrados en el lugar, según algunas fuentes, más de 6000 soldados pertenecientes a la Legión Tebana.
San Martín de Tours y la construcción de la basílica
Un siglo más tarde, el obispo de Sion san Teodoro hizo construir la basílica en el tradicional lugar de la masacre, e hizo exhumar los restos de los mártires encontrados gracias a san Martín de Tours.
La leyenda cuenta que cuando san Martín visitó la zona, ocurrió un hecho milagroso: la tierra comenzó a exudar sangre, indicando así el lugar donde descansaban los restos de los mártires. Luego recogió la sangre en tinajas especiales para distribuirlos a varias iglesias.
Euquero recuerda que:
Muchos de estos objetos ahora se conservan en el pequeño museo adyacente a la basílica, como así también la espada con su funda perteneciente a san Mauricio; también el cáliz con que recogió la sangre san Martín de Tours.
oca dorada para el Tesoro de las Reliquias.
La oración perpetua más larga de la historia
La iglesia construida en Agaunum se convirtió en el 515 en una abadía, gracias al rey san Segismundo, el primero en Occidente en recitar el Oficio Divino durante las 24 horas del día, gracias a un ciclo de coros. Es decir, ¡en este lugar se reza día y noche sin interrupción desde hace 1500 años!
Hoy está oración perpetua está encomendada a los Canónigos Regulares Agustinos de Letrán, quienes anualmente cada 22 de septiembre, día de la fiesta de san Mauricio y los mártires de la Legión Tebana, organizan una procesión con las reliquias por las calles del país.
Una abadía que ha resistido ante las vicisitudes por siglos
A lo largo de su historia, la abadía vivirá ha resistido al ritmo de los buenos y malos acontecimientos como: La Reforma, los incendios, derrumbes que han requerido reconstrucciones y el nacimiento del Universidad de la Abadía en 1806.
Reyes y príncipes han dado un aura internacional a la Abadía, buscando obtener beneficios de ella, pero también llenándola de regalos para honrar a los santos mártires. Los siglos XII y XIII fueron una época dorada para el Tesoro de las Reliquias.
Además, muchos ejércitos del mundo tienen a san Mauricio como su patrono, y condecoraciones al valor militar que llevan su nombre.
El campanario y su carrillón
Desde 2004, el campanario alberga el carillón más grande de Suiza, con sus 49 campanas, sus 14 toneladas y su rango de cuatro octavas.
El visitante puede escucharlo durante las fiestas religiosas y conciertos y es un verdadero deleite para los oídos.
Fuente: abbaye-stmaurice.ch