1JUAN PABLO II Y BENEDICTO XVI, GUARDIANES DEL CONCILIO
Cuando convocó el Concilio Vaticano II, Juan XXIII quería "revivir la fe cristocéntrica de la Iglesia para convertir al mundo moderno" , cree el teólogo estadounidense George Weigel, entonces estudiante. El objetivo, explica, era darle a la Iglesia un lenguaje que el mundo pudiera escuchar. Pero la aplicación del Concilio ha sido sustituida a menudo por una interpretación fuera de los textos, “el espíritu del Concilio”, subraya. Considera, por ejemplo, que en materia de liturgia se ha leído muy mal la constitución apostólica Sacrosanctum Concilium y considera que por eso los papas intentaron corregir las malas interpretaciones surgidas tras el Concilio.
Pero, lamenta, el motu proprio de François Traditionis custodes ha "empeorado las cosas en lugar de mejorarlas". Considerando el diálogo de la Iglesia con el mundo, George Weigel critica la aparición de una "Iglesia de los despiertos" que niega las verdades de la antropología bíblica. Deplorando la "crisis eclesiástica" que golpea a la Iglesia en Alemania, George Weigel explica que el Concilio no da una "clave autoritaria" para conformar su aplicación, sino que son Juan Pablo II y Benedicto XVI los encargados de darla. Y el principal, asegura, habría sido pronunciado durante el sínodo de los obispos de 1985, cuando se definió a la Iglesia como una “comunión de discípulos en misión”. La Iglesia que sigue estas enseñanzas hoy, asegura George Weigel, es la que prospera, a diferencia de las quimeras de las interpretaciones “ligeras” del Vaticano II.
2EL ASCENSO DEL CARDENAL GRECH
El cardenal Mario Grech, de 65 años, es una personalidad en ascenso en el Vaticano y el medio estadounidense The Pillar explica los motivos. Ex obispo de la pequeña diócesis de Gozo, en Malta, el joven prelado fue puesto al frente del Sínodo de los Obispos en 2019 por el Papa Francisco. Promovido a cardenal un año después, Mario Grech se convirtió en una figura central en el Vaticano cuando el pontífice argentino decidió lanzar su vasto Sínodo sobre la Sinodalidad. Este proceso de dos años que supone hacer que la Iglesia esté más atenta al Pueblo de Dios “probablemente será recordado como la piedra angular del legado del Papa Francisco”, explica el autor del artículo.
Entonces, algunos en Roma están comenzando a ver al cardenal Grech como un heredero natural del papa argentino, quien, en caso de un cónclave, "estará mejor equipado para perseguir gran parte de la visión del papa para el futuro". The Pillar cuenta cómo la secretaría del Sínodo se convirtió en pocos meses en el motor del aparato vaticano. “Funcionarios de varios departamentos del Vaticano le han dicho a The Pillar que [la secretaría] ahora opera como un nuevo tipo de 'primer dicasterio'".
Otro funcionario de la Curia confió que “el cardenal Grech está en medio de todo”. En definitiva, el maltés es el cardenal que encarna esta nueva era sinodal en la Iglesia católica. Pero el artículo concluye con un ligero matiz: si esta Iglesia sinodal se convierte en sinónimo de una crisis eclesial permanente, su estatura podría sufrir.
3Y TAMBIÉN EN LA PRENSA INTERNACIONAL…
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Para el obispo Hinder, vicario apostólico para el norte de Arabia, considera que el viaje del Papa Francisco a Baréin a principios de septiembre es una estrategia positiva para acercarse a las diferentes corrientes de la fe musulmana. En el pequeño reino viven principalmente chiítas, pero son los sunitas quienes lo dirigen.
