El regalo que le arrancó una sonrisa al Papa para su cumpleaños

El mural de Maupal le arrancó una sonrisa al papa Francisco tras la audiencia general del miércoles, 14 de diciembre, en el Aula Pablo VI. Un regalo especial con motivo del aniversario de su 53º ordenación sacerdotal, cumpleaños (17 de diciembre) y por la Navidad.

El artista callejero Mauro Pallotta (alias Maupal) regaló al Papa para su 86 cumpleaños un nuevo mural que se estrenará justo el sábado en la sede de la colina Gianicolo del hospital pediátrico Bambino Gesù.

El mural representa al propio Francisco, a un niño en silla de ruedas y a la paz. Nada más actual. Y así, a diario, los niños con sus familias y el personal del hospital del Papa compartirán un mensaje de esperanza.

El artista romano nació a dos pasos del Vaticano. Maupal ha hecho del arte una verdadera misión para transmitir mensajes de reconciliación. Maupal dice que el Papa «nunca ha dejado de ser fuente de inspiración por su humildad y liderazgo».

¿Cómo fue la reunión con el Papa Francisco?

Es la tercera vez que me encuentro con el Papa, pero en esta ocasión he tenido la oportunidad de hablar un poco con él porque con motivo de su próximo cumpleaños he donado a Francisco toda la colección de obras que he realizado a lo largo de los años en las calles de Roma y en esta colección he añadido también una obra inédita que pronto se expondrá en el hospital pediátrico Bambino Gesù. Francesco estaba muy divertido, se reía mucho y, en resumen, probablemente ya conocía mi trabajo y fue una gran satisfacción para mí.

Háblenos de su última obra de arte callejera que será expuesta en el hospital Niño Jesús de Roma

La obra se me ocurrió para exponerla en un hospital infantil, así que me fijé en un niño enfermo y, por tanto, en silla de ruedas. Pero entonces la fuerza de este niño consigue empujar al Papa, que también va en silla de ruedas. Como si estuviera en un balancín para hacer despegar y volar una paloma de la paz. Y ya llevaba un par de semanas preparando el trabajo. Pero hace sólo unos días el Papa Francisco acababa de decir que hay que dar a los niños y a las niñas un rayo de paz.

¿Cuánto tiempo lleva haciendo este trabajo? Y ¿Por qué se inspira en el Papa para sus obras callejeras?

Sí. Siempre he sentido el arte dentro de mí, fui a la escuela de la Academia de Bellas Artes y luego empecé a pintar. Digamos que practico street art desde 2014 porque mi primera obra fue super pope. Y a partir de entonces, prácticamente sólo empecé a practicar el arte callejero. Mi inclinación hacia la figura del Papa Francisco ni siquiera es demasiado religiosa, sino que está motivada en la humanidad y la humildad. En resumen, siempre recurrimos a las personas más destacadas del mundo para mejorar las cosas, y entre estos poderosos creo que el Papa Francisco se encuentra entre los poquísimos más destacados. Así que, de los pocos poderosos de la tierra que están iluminados, es justo tenerlo en cuenta.

¿Puede explicarnos, por ejemplo, por qué hizo super pope?

Decidí pintarlo así. Porque la primera impresión que tuve cuando Jorge Bergoglio se convirtió en Papa fue la de una persona muy humilde, muy empática y cercana a los más débiles, así que decidí retratarlo como un superhéroe en potencia. Pero si miras el diseño en profundidad puedes ver detalles que te hacen comprender ciertas cosas. No sé, tiene un poco de sobrepeso, es un poco gordito lleva gafas graduadas, así que un superhéroe no lleva gafas graduadas, ve muy bien. Además, en la valija con los valores cristianos también lleva la bufanda de su equipo de fútbol favorito, el San Lorenzo de Almagro. Todo ello expresión también de valores muy terrenales. Así que quería retratar a un superhéroe corriente, un superhéroe sencillo y humilde que pueda ser un ejemplo para cualquiera.

Al Papa no le gusta que le exalten como héroe, según algunas entrevistas…

Las personas más grandes son siempre extremadamente humildes y aprecio que él no quiera ser idolatrado. En el dibujo se puede apreciar el hecho de que puse detalles que no lo retratan como un ídolo total, sino que es una persona sencilla que podría ser un superhéroe como lo podríamos ser cualquiera de nosotros. Y simplemente creo que todas las personas más grandes siempre tienen como base una gran humildad. También porque la humildad más profunda esconde siempre la ambición más elevada. Así que también estoy de acuerdo con las palabras del Papa Francisco sobre no querer ser idolatrado. Sin embargo, la mía es una imagen artística muy pop que también consigue arrancar una sonrisa.

¿Es un arte que llega mucho a los jóvenes?

Me imagino que llega a los jóvenes, aunque digamos que esta imagen en la que he pensado se ha convertido casi en un retrato popular del Papa Francisco. A estas alturas la gente lo ve como super pop. Pero es sobre todo un género artístico que llega primero a los jóvenes. El Papa Francisco es extremadamente sociable, es una persona sencilla, una persona empática que, digamos a primera vista, puede parecernos casi un abuelo, con el que es fácil conversar.

¿Qué impresión se lleva del Papa?

Es como una persona que ya conocía. Y lo que más me impresionó fue su mirada, sus ojos, que parecían los ojos de un chico de 15 años, tiene unos ojos llenos de vida, extremadamente vivos y despiertos. En resumen, la impresión es la de tener delante no a una persona mayor, sino a una persona joven y llena de vida.

Todavía recuerdo esta imagen del Papa Francisco subiendo una escalera y haciendo este dibujo…

Este es un dibujo que hice en 2016 y lo puse en la calle. Una obra a pocos metros de la entrada de la Porta Sant'Anna del Vaticano. Recuerdo que fue en el momento en que prácticamente se produjo la anexión de Crimea por parte de Rusia y todo el mundo hablaba de guerra, excepto el Papa Francisco que seguía profesando la paz y sin embargo nadie escuchaba. Llegó un momento en que pensé: sí, si yo fuera Papa me comportaría como él, pero nunca podría ser Papa, ¿verdad? Así que ahí me vino la idea. Pensé que yo no puedo ser Papa, pero él puede ser artista callejero. Y por eso dibujé al Papa Francisco como un artista callejero que por la noche va con un amigo suyo que hace de vigía y controla la situación, que en este caso es el guardia suizo, y se sube a una escalera puesta boca abajo para dar testimonio de la dificultad y así también tiene que estirarse con su cuerpo para jugar al tic tac, ya sabes, y ganar con el símbolo de la paz. Así que muestra a la humanidad el camino ganador de la paz.

Según su opinión, ¿por qué no se escuchó al Papa en 2018 y ahora estamos en esta situación de Guerra?

La primera vez el mundo no se tomó el peligro en serio, ahora todos somos conscientes y por supuesto sólo hay que ver lo difícil que se ha vuelto la supervivencia con lo cara que está la energía y la vida, en general. Además de la parte más importante que es el sufrimiento humano que se vive en esos lugares del mundo, por lo que, en mi opinión, el llamamiento del Papa Francisco para encontrar una forma de paz se escuchará ahora un poco más.

Para más información sobre la obra del artista hacer clic aquí