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La comisión está compuesta por profesionales de diversas áreas técnicas, artísticas, culturales y legales. Asimismo, el residente de este grupo especial es el monseñor Pistilli, Obispo de Encarnación y el secretario ejecutivo es el padre Hugo Fernández.
Esta comisión especial tiene a su cargo la restauración de templos, principalmente jesuitas y franciscanos que forman parte de la riqueza cultural de este país sudamericano.
Restauración de templos
En el 2022, en plena recuperación por la pandemia del Covid-19, en Paraguay se culminó la restauración del las hornacinas y el pulpito de la parroquia San Lorenzo de Altos, una de las Iglesias más antiguas del país con vestigios del Siglo XVIII y XVII inclusive.
Actualmente se llevan a cabo los trabajos de restauración de los retablos laterales del Templo parroquial de la Santísima Trinidad de la Arquidiócesis, estos trabajos son realizados por los técnicos del Ministerio de Obras Públicas y también técnicos de la Secretaría Nacional de Cultura, con el asesoramiento y el acompañamiento de esta comisión.
También el templo de San Joaquín en Caaguazú, Diócesis de Coronel Oviedo, que se caía a pedazos, se han iniciado las obras preliminares de restauración edilicia. Este es un antiguo templo jesuítico y también se realiza la intervención de las imágenes de esta reliquia artística y religiosa considerada el último templo jesuítico del Paraguay.
También en Caazapá se llevan trabajos de restauración de obras sacras del antiguo templo de San Pablo de San Pablo en la misma ciudad de Caazapá. En enero de este año se ha entregado la obra de puesta en valor de su antiguo púlpito realizado posiblemente en los talleres franciscanos del año 1.700.
Asimismo, a través de esta comisión se están llevando a cabo trabajos de estudios para realizar un protocolo de intervención a la Catedral Metropolitana de Asunción, por sobre todo en su situación estructural.
Recursos provistos por fieles y el Estado
Los trabajos de restauración de estos templos católicos tienen un alto costo. Si bien estos son vienes patrimoniales del Paraguay, existen limitaciones presupuestarias y, en algunos casos, los propios fieles son los que financian las intervenciones.
Según dijo el padre Hugo Fernández, en conversación con Aleteia, en algunos casos los mismos pobladores y parroquianos son quienes solventan los gastos generales. En otros casos, estos proyectos se llevan adelante con recursos del Estado, para lo que se realizan licitaciones.
Como ejemplo, el sacerdote comentó que los retablos del Trinidad, Asunción, están siendo restaurados con el aporte de un empresario católico llamado Nicolás Latourrette Bo.
¿Cómo se llevan adelante estas restauraciones?
El padre Hugo Fernández, secretario de la Comisión Episcopal de los Bienes Culturales de la Iglesia, explicó que las intervenciones se realizan bajo la supervisión de la Secretaría Nacional de Cultura de Paraguay, que se encarga de aprobar y modificar los protocolos de intervención.
«También una gran labor de ejecución de restauración lo vienen realizando los técnicos del departamento de restauración del Ministerio de Obras Públicas a cuya cabeza se encuentra la Arquitecta Myriam Mármol. Este departamento ha restaurado recientemente los retablos de Valenzuela de mediados del 1.700 y el de la ciudad de Altos», comentó.
Templos que requieren intervenciones
En el Paraguay existen una cantidad inmensa de templos patrimoniales, cargados de historia, de acontecimientos nacionales, de resistencias sociales y sobre todo de vivencia y expresión de la fe.
En total son 89 templos católicos catalogados como de importancia patrimonial, entre ellos templos, imaginería y otras dependencias religiosas que datan de mediados del Siglo XVII, las emblemáticas reducciones franciscanas y jesuíticas del siglo XVIII y los templos construidos o refaccionados en época de los López.
«De todos ellos casi 40 templos necesitan actualmente de refacciones o restauraciones. Existen casos más urgentes que deben ser tratados lo más antes posible como es el caso del templo de Yaguarón, cuya ejecución de restauración actualmente está suspendida. También la de Itá, Santiago Misiones, Laureles, Caraguatay, entre otras», explicó el sacerdote.
El legado jesuítico y franciscano en Paraguay
El padre Fernández recordó que la riqueza cultural que han dejado al Paraguay los talleres franciscanos y jesuitas, desde inicios del siglo XVII, se pueden apreciar en varios elementos que caracterizan al país.
«Algunos elementos son intangibles como la protección y divulgación de la Lengua Guaraní, los saberes medicinales y culinarios de los productos de la tierra», dijo.
Asimismo, el sacerdote explicó que otros legados tangibles son los estilos de edificación, la asimilación del arte europeo por parte de los nativos y «la gran lección de fe, de trabajo comunitario y esfuerzo común que se reflejan en el arte en las iglesias».
La música, las oraciones, la piedad popular y muchas otras cosas que en el Paraguay aún lo vivimos gracias al legado de los misioneros tanto franciscanos y jesuitas, son otros legados, dijo el sacerdote.
