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La fecha de su nacimiento es incierta, se sitúa entre finales de 1886 y principios de 1887. Ella decía que había nacido en Navidad. Bautizada en marzo de 1887, Clementine era la primera de los siete hijos de Janvier Reuben y Mary Antoinette Adams, una pareja criolla que vivía en la plantación de Hidden Hill, en Louisiana. Clementine no sabía leer ni escribir, desde bien pequeña se unió a los suyos en el trabajo del campo, recogiendo algodón.
En 1907 fue madre por primera vez, aunque no llegó a casarse con el padre, Charlie Dupree, con quien tuvo otro hijo. En 1924, (hacía diez años que había fallecido Dupree), Clementine se casó con Emmanuel Hunter, un leñador también criollo que vivía en la plantación de Melrose. Allí se instalador en una humilde cabaña en la que Clementine dio a luz a siete hijos, de los que tuvo que enterrar a dos.
La vida del campo, parir, cocinar, cuidar de los suyos, todo ello no fue un problema para esta mujer que un día tuvo la necesidad de expresar sus más profundos sentimientos a través del arte.
A finales de la década de 1920, Clementine Hunter trabajaba como cocinera y ama de llaves en la plantación de Melrose donde su señora, Cammie Henry, era una anfitriona muy conocida. A su hermosa casa acudían escritores y artistas de la zona y en sus veladas pintaban.
Clementine recogía los tubos de pintura que dejaban en Melrose y los utilizó para empezar a desarrollar su propio arte. Un deseo difícil de cumplir, le faltaban horas en el día, aunque no voluntad. Cuando a principios de la década de 1940 su marido cayó enfermo, Clementine tuvo que trabajar aún más intensamente además de cuidar a Emmanuel que yacía en cama moribundo. A su muerte, en 1944, quedó sola y a cargo de sus hijos.
Fue entonces cuando intentó vender algunas de sus obras, ganando apenas unos centavos. Poco a poco, su talento empezó a ser conocido en distintos ámbitos artísticos de los Estados Unidos, hasta que su obra y su persona se convirtieron en célebres.
La obra de Clementine Hunter, pintora afroamericana autodidacta, empezó a ser aclamada por la belleza de sus obras que se convirtieron en hermosas recreaciones de la vida en las plantaciones.
Ferviente católica, parte de sus pinturas estuvieron también dedicadas a la Historia Sagrada. Clementine aseguraba que su talento era un regalo de Dios. En "Natividad con la Virgen, ángeles y los Reyes Magos" hizo una hermosa fusión situando este momento de la vida de Jesús en un escenario muy parecido al de las plantaciones en las que había vivido.
Como esta, otras pinturas eran una visión muy personal de Clementine de escenas bíblicas ubicadas en su tierra, como "Crucifixión en algodón". Una hermosa mezcla entre lo divino y lo humano que hicieron de sus pinturas un arte único.
Miles de obras realizó Clementine Hunter, quien se convirtió en la primera artista afroamericana en tener una exposición individual en el Museo de Arte de Nueva Orleans. Recibió un doctorado honoris causa en Bellas Artes por la Universidad Estatal del Noroeste de Luisiana. En 2017 se estrenó una película documental sobre su vida. En la actualidad son varios los museos de los Estados Unidos que acogen la obra de Clementine Hunter.
A pesar de la fama y de invitaciones tan importantes como la que le llegó de la Casa Blanca, Clementine Hunter nunca dejó el que siempre fue su hogar, donde falleció en 1988. Había cumplido 101 años. Fue enterrada en el cementerio junto a la iglesia de San Agustín, que tantas veces había utilizado como inspiración para su arte.
